Las fiestas de Vilalba antaño (II)

CARLOS GARCÍA FRAGA VILALBA

VILALBA

19 ago 2015 . Actualizado a las 12:33 h.

Durante largos años las fiestas se hacían por recaudación popular de comisiones formadas en sociedades culturales o grupos de amigos encargados de los festejos, que recorrían todos los domicilios solicitando ayuda económica, ya que en aquellas fechas el ayuntamiento no disponía de fondos para estos menesteres.  

   Era laborioso; pero unía más a los vecinos y se escuchaban todo tipo de peticiones y reclamaciones, ya que, durante muchos años y hasta finales del pasado siglo, era una sana costumbre que un miembro de la corporación municipal lo fuese a la vez de la comisión de fiestas y así escuchaba de los vecinos los problemas de sus calles y solicitaban que la banda de música tenía que pasar por las calles, sobre todo en la calle Ferrería, donde siempre reivindicaban que aquello había sido el centro de la villa. 

  Invitación a café

En la Rúa Nova la gente ya esperaba la comisión, dinero en mano y la invitación al café con caña. Daba gusto ir por esta calle. Otros decían que no estaba su marido, aunque acabase de entrar en casa. Había que volver y la comisión lo hacía, pues el dinero era necesario. Según se iba recaudando, se publicaban las aportaciones de cada uno en la Farmacia Moderna, y el que no contribuía aparecía con un cero, lo que causaba el sonrojo y la vergüenza del  vecino, cuya reacción no era siempre la deseada.

  También se publicaban las cuentas de gastos e ingresos para que todo el pueblo supiese en qué y cómo se invertían sus aportaciones. Así, según nos informa Otero Cao en un trabajo titulado «Curiosidades» y publicado en el programa de fiestas del año 1955, en el año 1926 la recaudación fue de 2.265,40 pesetas. Y en el año 1929, 3.620 pesetas entregando las 6 restantes al presidente de la comisión  Pro-Hospital Asilo, Agustín López Arias. 

  Orquestas y bandas

Orquestas y bandas de música eran lo más solicitado, ya que no en vano contó durante largos años con dos bandas, la de los Matos y la Nueva Lira.  Hoy, afortunadamente, volvemos a disfrutar de una importante colectividad musical.