La relación entre los dueños y el Concello es excelente, pero la diferencia económica resulta enorme
24 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Sarria optará por la vía de la expropiación para hacerse con la Fortaleza y la propiedad tras no llegar a un acuerdo con los propietarios.
El motivo de adoptar esta determinación se debe a que la diferencia entre lo que ofrecen los responsables municipales, 326.000 euros, y lo que piden los dueños, alrededor de 1.750.000 euros es abismal.
La explicación de una diferencia tan abultada radica en las valoraciones que hicieron los técnicos municipales tanto de la finca como de la propia torre. Los dueños consideran que el el terreno es urbanizable y de uso residencial y desde el Concello mantienen que está sujeto a una modificación de las normas subsidiarias y que debe de valorarse como dotacional y libre. La diferencia entre una y otra tasación se aproxima a los 800.000 euros.
En lo que compete a la Fortaleza, sus actuales poseedores consideran que por su valor histórico, la calidad de las piedras con las que está construida y el trabajo que supondría edificarla, su valor rondaría el medio millón de euros. Por contra, los tasadores municipales consideran que está muy deteriorada y que por lo tanto su valor únicamente se aproximaría a los 20.000 euros.
El resto de diferencia en las valoraciones se refiere a algunas construcciones menores que existen en la amplia finca que según sus propietarios tienen un considerable valor, mientras que desde el ayuntamiento apenas les dan relevancia económica.
Lo más positivo del caso es que las negociaciones fueron cordiales en todo momento y hubo buena sintonía entre familia y responsables municipales.
La expropiación será uno de los puntos que el equipo de gobierno incluirá en el orden del día de un pleno extraordinario que se celebrará posiblemente a principios del próximo mes.
La intención del Concello es que el proceso se agilice lo máximo posible, por lo que tratarán de tomar posesión de la propiedad en el plazo más corto que les conceda la ley.
El siguiente paso será proceder a la rehabilitación del propio monumento y del resto de la propiedad, para lo que el gobierno dice que tiene apoyo de la Xunta.