Decenas de parroquias se quedarán sin bus si la Xunta no ofrece una respuesta

El interior y el sur de la provincia de Lugo no interesa a las empresas de transporte interurbano de viajeros. Así se puede comprobar en el plan para el transporte de Galicia que presentó la Xunta con el fin de reestructurar el servicio tras la renuncia de hasta 48 líneas que operaban las empresas en toda la provincia, o lo que es lo mismo, el 63% de las que ofrecen servicio en Lugo.

La eliminación de gran parte de estas líneas supone el cierre de paradas en numerosas parroquias y lugares por las que atravesaban los buses, no así por las cabeceras de comarca o capitales de municipio, que sí cubren otras empresas. Por ejemplo, el trayecto entre Lugo y Palas de Rei se puede hacer con la empresa Freire, que circula por la N-540 en dirección a Santiago. Pero en cambio, Mourenza, que también hace el recorrido Lugo-Palas, abandona esta línea cuyo trayecto atravesaba núcleos como Burgo, Retorta, Vilamaior Ferreira, San Vicente o Laia.

La pérdida de población y el mal estado de numerosas carreteras provinciales no anima a las empresas a continuar con líneas deficitarias. La Xunta busca ahora la manera de no dejar a los vecinos de las aldeas sin servicio, lo cual supondría otro golpe para los lucenses que viven en el rural.

En algunos casos la solución va a tener que formar parte de los nuevos servicios donde se registraron renuncias, previstos por la Xunta para agosto. Un ejemplo evidente es la pérdida de interés de las empresas por cubrir a las parroquias de Terra Chá. En este sentido, Arriva Noroeste renuncia a numerosas rutas que unían Lugo con Vilalba y Viveiro, Lugo con Meira y Ribadeo, Lugo con Vilalba y Foz o Lugo con Guitiriz.

Autos Lozano muestra su falta de interés por el recorrido de Lugo a Vilalba, que atraviesa lugares de Outeiro de Rei, Ribeiras de Lea, Arneiro o Feira do Monte, con paradas en hasta 38 núcleos. También casi 40 paradas tiene la ruta entre Lugo y A Pastoriza que abandona Autocares Darriba, con un recorrido que atraviesa Muxa, Teixeiro, Rozas, Duarría, Santa Leocadia, Bazar, Castro, Muimenta o Reigosa, entre otros lugares. Además, incluye paradas en el HULA y en la residencia de Ribeiras de Lea.

Otra ruta transversal que pierde interés es la que une Lugo con A Fonsagrada, que realiza Her-Vei, con hasta 50 paradas en villas y parroquias, incluidas las de Neira de Rei (Baralla).

Dos concellos sí cofinancian

La Xunta, para realizar el plan, envió a los concellos de la provincia una encuesta para que explicasen sus circunstancias y propusiesen sugerencias, incluida la posibilidad de que estuviesen dispuestos a cofinanciar el gasto del servicios de bus. Hasta 31 concellos renunciaron a contestar al cuestionario que les envió. De los ayuntamientos que sí respondieron datos para el estudio solo dos señalaron que estarían dispuestos a cofinanciar rutas de transporte en sus municipios: Trabada y O Valadouro, ambos gobernados por el PSOE. La mayoría contesta que no. A nadie se le escapa que las arcas municipales no están muy boyantes.

En el lado positivo, las empresas del sector mostraron su interés en mantener hasta 11 contratos actuales, incluyendo rutas por la montaña como la que une Navia con A Fonsagrada o Sarria con Becerreá. En A Mariña quieren mantener varios enlaces, especialmente hacia Ortigueira.

48 líneas

76 en total

La renuncia de las empresas de transporte suponen el 63% de las existentes, porcentaje solo superado por Ourense (81%)

24 contratos

Solo se conservan 11

De los 33 contratos de la Xunta con las empresas para la provincia, estas renuncian a 24, el 73% del total. En Ourense es el 92%.

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