«Hay quien roba a los gitanos: el edil del BNG», dijo el exalcalde, que no fue al banquillo por estar enfermo

José Fernández LUGO/LA VOZ

MURAS

Issam Alnagm acusó en un discurso al actual alcalde de gastar siete millones «en tres bocadillos»

07 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El exalcalde de Muras, Issam Alnagm Azzan, es de los habituales en los banquillos. Estaba citado para ayer para rendirle cuentas a Alfonso Jiménez Marín, el titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Lugo y al fiscal, después de que se le embalase la lengua en la inauguración de la polémica aldea etnográfica de Carelle Grande. Pero no asistió. Está enfermo. Queda para otra vez el juicio en el que le atribuirán un delito de calumnia del que fue víctima el actual alcalde del municipio, cuando era concejal del BNG.

Esto fue textualmente lo que dijo Issam Algnag Azzam en la inauguración: «Sabéis que los gitanos tienen mala fama, pero hay alguien que roba a los gitanos y este es el concejal del BNG de Muras». Y siguió: «Él gasta siete millones en normalizaciones lingüísticas para los gitanos y de esto, van tres bocadillos para los gitanos y el resto para el bolsillo».

En otro momento de su discurso añadió, refiriéndose al que meses después le arrebató el mando: «Y luego tiene la cara de decir que somos ladrones y miserables y él gasta siete millones en nada, en tres bocadillos. Nosotros gastamos aquí (se refiere a la aldea etnográfica que estaba inaugurando) dos millones y medio en todo este patrimonio de 60 hectáreas y le acompañan otros que se llaman periodistas, que son unos mentirosos, unos asquerosos (...)».

¿Y qué pintan los gitanos en el discurso de Issam Alnagm Azzan? Pues los sacó a relucir porque Manuel Requeijo, actual alcalde, en el verano de 2014, cuando se produjo este curioso discurso, edil del BNG tenía su puesto de trabajo en la Fundación Secretariado Gitano. El edil nacionalista no estaba presente ese día en la inauguración de la aldea, pero tuvo constancia de las declaraciones y posteriormente formuló una denuncia que dio lugar a la apertura de unas diligencias en el Juzgado de Instrucción número 2 de Vilalba. Durante el proceso ya tuvo que ser suspendida otra declaración porque el alcalde se encontraba enfermo.

Las manifestaciones en cuestión pueden obligar a Alnagm Azzam a tener que rascarse el bolsillo. Si el juez le pone la multa que plantea el fiscal tendrá que abonar algo más de 21.000 euros.

Pero el exalcalde de Muras ya tiene callo en cuestiones judiciales. En enero del 2014 fue al banquillo, con miembros de su junta de gobierno, para responder de un presunto delito contra el medio ambiente por el que el fiscal le pidió seis años de cárcel. Acabó absuelto.

También fue al banquillo porque lo acusaban de utilizar influencias para no pagar multas de tráfico. En este caso también consiguió la absolución. Y poco antes de entrar a este juicio dejó a los periodistas una auténtica perla, molesto con algunas actitudes de sus colegas de partido: Elogiando la actitud de Manuel Fraga, llamó yeyés a algunos dirigentes actuales del PP.

Pero la historia judicial de la que más se habló en Muras fue de un incidente que el regidor tuvo con un secretario municipal que lo denunció por agresión, y finalmente ganó el funcionario.