Desaparecen muchos de los carteles que indican el estado de los manantiales
25 jun 2017 . Actualizado a las 23:26 h.La mitad de las fuentes que controla el Ayuntamiento de Lugo están contaminadas. Esta afirmación la efectúa el portavoz de Lugonovo, Santiago Fernández Rocha, a la vista de los datos más recientes de que dispone de las analíticas efectuadas por el correspondiente departamento municipal. El 50% de las fuentes mantienen, según dicho grupo, un elevado grado de contaminación bacteriológica. El citado mismo edil lucense: «Están afectadas 21 de 47 e, ademais, 13 delas conteñen restos fecais. Trátase dun problema de primeiro orde social, que, trimestre tras trimestre, a Administración ignora».
Rocha llama la atención sobre el estado de las fuentes porque considera que en estos días puede ser más intenso el recurso a las fuentes como modo de recoger agua para casa o pasa saciar la sed al momento. «Hai que avisar da especial perigosidade que pode ter o seu consumo nestas datas do ano, cando se multiplican as afeccións gástricas e o bo tempo convida a camiñatas e aumenta o uso dos mananciais». Cita un caso concreto: «Un bo exemplo témolo na que se atopa na estrada de Santiago, fronte ao complexo hoteleiro, onde moitos veciños da contorna recollen auga sen saber que leva axentes contaminantes».
En la misma línea, Rocha pone énfasis en el riesgo que pueden suponer las fuentes con agua no apta para el consumo o en condiciones inadecuadas situadas en el Camiño de Santiago. «Hai multitude ao longo do seu traxecto, polo que deberan estar especialmente vixiadas ante a elevada frecuencia de peregrinos e o calado tanto sanitario, como ecolóxico, que pode ter un problema derivado da súa inxestión».
Sin cartel
En numerosos casos desaparecen los carteles que indican si una fuente no es potable. Es un problema que tiene una doble causa. Por un lado, la retirada de los carteles obedece a gamberradas. Por otro, está relacionado con un cierto componente de índole social: hay quien ha usado durante largos años el agua de una fuente concreta y se niega a admitir que no esté en condiciones.