La falta de relevo generacional, la más grave amenaza para el asociacionismo

Enrique Gómez Souto
ENRIQUE G. SOUTO LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Los jóvenes colaboran puntualmente, pero no tienen interés en asumir tareas directivas

14 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En el asociacionismo lucense cunde la preocupación por la falta de relevo generacional, por el desinterés de los jóvenes por tomar las riendas de los colectivos vecinales y culturales. Es una preocupación que comparten la Federación Provincial de Asociacións de Veciños y la Unión de Asociacións Veciñais, que ven cómo, en general, los más jóvenes directivos superan ya los cincuenta años.

Para el presidente de la Asociación de Veciños, Comerciantes e Industrias de A Milagrosa, Jesús Vázquez, que es también el presidente de la Federación Provincial, la falta de relevo generacional «é o reto máis complicado que ten que afrontar o movemento veciñal». Es un problema que afecta a toda Galicia, pero singularmente ?dice Vázquez? a Lugo y Ourense. Indica que una gran parte de los actuales directivos de asociaciones tomaron el relevo de otros que eran «a xente da posguerra». Los dirigentes de hoy nacieron en las décadas de los 50 y los 60. «Nós somos a xeración da Transición» y a partir de ella apenas hay una incorporación significativa a las asociaciones y menos aún a los cargos directivos. «Os principais dirixentes levan 30 anos ou máis no mesmo papel».

Vázquez explica que la falta de relevo en las asociaciones se deja ver con claridad ya en algunos barrios y parroquias. «Deixaron de traballar ou morreron os directivos que se encargaban de todo no barrio ou na parroquia e acabáronse as festas». No es solo el campo reivindicativo el que está en riesgo de quedar abandonado; también otros frentes, como la organización de las celebraciones parroquiales.

Valentín Arias, portavoz de Unave, señala: «Non hai, non, moitos rapaces que tomen o relevo. A miña experiencia é que se pides colaboración para algo concreto, hai rapaces que axudan, pero é unha axuda puntual».

Eficiencia

Sigue explicando Arias: «Costa moitísimo que a xente nova entre nas directivas das asociacións». Este líder vecinal indica que quizá los jóvenes no ven en el movimiento asociativo una herramienta suficientemente eficaz o, sencillamente, están demasiado ocupados en sus propias cosas. «Eu creo que as asociacións seguen sendo necesarias e válidas e tamén me parece que hai moitos rapaces que miran moito para si mesmos».

El portavoz de Unave cree que quizá los que deberían tomar el relevo al frente de las asociaciones no entienden que, a través de ellas, se trabaja para mejorar sus condiciones de vida.

Campo cultural

Desde el campo del asociacionismo cultural, el historiador Adolfo de Abel Vilela ve también con preocupación el futuro de los colectivos que operan en este campo. Una de las asociaciones de las que forma parte es la de antiguos alumnos de la Escola de Artes Aplicadas. «Cao leva de presidente uns corenta anos; e facemos eleccións, pero non hai novas incorporacións, somos os mesmos que cando empezamos». Adolfo de Abel preside el colectivo Lugo Patrimonio, que, como su nombre indica, se dedica a la protección y divulgación del patrimonio histórico lucense. «Todos os que se apuntan son xubilados», resume.

El conocido historiador señala: «Son situacións moi diferentes. Hai que ter en conta que cando empezamos nas asociacións practicamente no había nada, viñamos dunha época na que a xente tiña ganas de participación; os que estamos nesto somos case todos desa xeración».