Durante las obras para la instalación de la nueva tubería de impulsión de la traída de agua, entre la potabilizadora y los depósitos de A Piringalla, aparecieron en este barrio restos de un castro de considerables dimensiones, del que no había conocimiento previo. Desde entonces, en distintos sectores sociales y en diferentes momentos se reclamó de la Administración la completa excavación de este yacimiento arqueológico. En el pleno de ayer, el Bloque defendió una moción en el mismo sentido, que fue aprobada por unanimidad. La concejala de Cultura, Carmen Basadre, indicó que el castro está muy arrasado, en lo que se refiere a construcciones en la parte en la que se intervino. Pero cabe la posibilidad, apuntó, de que, dado su considerable tamaño, haya zonas mejor conservadas. A propuesta del PSOE, el Concello reclamará la colaboración de la Xunta para el fin indicado.