«Han hecho un cortafuegos forestal en vez de arreglar el Camino Primitivo»

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

MANUEL

Peregrinos e historiadores se quejan de las obras que realiza la Xunta en el límite entre Asturias y Lugo

27 may 2016 . Actualizado a las 12:26 h.

Que el Camino Primitivo se está convirtiendo en un nuevo maná tras ser declarado Patrimonio de la Humanidad lo prueban los datos de peregrinos en los primeros cuatro meses del 2016 (1.019), 62 más que en el 2015. Ante la previsible avalancha de caminantes, desde la Xunta se están acometiendo trabajos en la ruta que no están dejando indiferente a los peregrinos y a los historiadores del Camino.

«Estaba subiendo el puerto del Acebo en su vertiente de Asturias, con un paisaje precioso, con mucho encanto, y cuando llego al límite con Lugo me encontré con un cortafuegos, con una pista forestal, con máquinas que estaban allanando el Camino», explica Carlos, un peregrino de Madrid que se encontró ayer con uno de estos trazados que la Xunta está modificando.

«Llegué al albergue de A Fonsagrada, se lo consulté a la gente de la villa, y se quedaron sorprendidos por el cambio», explica el peregrino. «Para mí le quita todo el encanto al Camino y es una pena. Para mí esto no es el Camino de Santiago», sentencia este peregrino madrileño que arrancó de Oviedo.

El mayor especialista en el trazado Primitivo, el historiador lucense Ricardo Polín, fue categórico cuando muy dolido e indignado afirmó: «O que están a facer é un atentado propiciado pola Administración, que debería ter consecuencias en nome de ceses ou dimisións».

«Fan un Camiño turístico»

«O Camiño Primitivo é un símbolo da nosa historia, é unha marca de autenticidade, de rusticidade, e non se pode consentir que se modifiquen as súas dimensións, que se escave o pavimento ou se alteren os elementos inmateriais que forman parte da ruta desde hai séculos», explica Polín.

Para este experto, actuaciones como las que acomete la Xunta en A Fonsagrada -o recientemente no lugar de Bascuas (Lugo) «co aval dos arqueólogos municipais»- obedece a una propuesta por parte de los técnicos de la Xunta que cambian los senderos y caminos históricos por «pastiches, transformando a ruta nun camiño turístico, e con isto o que estamos a facer é matar o Camiño».

En el caso concreto de las máquinas que están trabajando en el límite entre Asturias y Lugo, en el alto de O Acebo (1.100 metros), Polín destaca que se trata de un camino apenas modificado desde el siglo XIX. «A Unesco di que os camiños debe de ter a traza de seu, por si mesmo, indentificable e protexido. E isto é todo o contrario, isto é impresentable», explica o historiador lucense. Polín afirma que Icomos, en un informe del 2007, ya advertía que los caminos de Santiago «debían pervivir co seu trazado físico».

Para Ricardo Polín, el camino no solo es además todo lo que rodea al sendero, como hitos, árboles centenarios, cruceiros o piedras. «Para os técnicos da Xunta é unha traza funcional para que os peregrinos fagan o camiño de maneira cómoda ¿Queremos matar o Camiño? Os concellos teñen que espabilar, porque para manter o que temos hoxe houbo que loitar moito anos».

El historiador señala que actuaciones como las de ayer en A Fonsagrada le retrotraen a hace más de 25 años cuando se producían agresiones en los diferentes caminos de Santiago. «Pouco avanzamos e menos con este exemplo da Administración».

«Para mí pierde el encanto, esto no es el Camino de Santiago»

Carlos

«A Xunta recrea un sendeiro irreal, facendo un pastiche»

Ricardo Polín