El hallazgo de ropa del lucense José Cortiñas con sangre podría derivar en otra causa

La Voz

LUGO CIUDAD

06 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las novedades más significativas de este caso se produjo hace relativamente poco tiempo. Según trascendió, hijas y familiares de Lupe Jiménez se desplazaron hasta donde se considera que se consumó el crimen para depositar unas flores. Al limpiar el entorno, y según pusieron ayer de manifiesto fuentes de la acusación particular, se toparon sorpresivamente con la ropa que se sospecha llevaba José Cortiñas cuando se desplazó a la vivienda de Vilaboa a buscar a su mujer. Las prendas -unos vaqueros, una camiseta de rayas y un jersey- estaban ensangrentadas y fueron entregadas a la autoridad judicial que, a su vez, ordenó su traslado a un laboratorio para su análisis.

El resultado de estas pruebas podrían determinar la apertura de una causa judicial paralela. De hecho, la acusación particular y la Fiscalía se han reservado la apertura de una pieza separada en el supuesto de que los análisis confirmen que existió una colaboración o encubrimiento.

Si se confirma que la ropa pertenece a Cortiñas y el perfil genético de la sangre se corresponde con la fallecida, se entendería que terceras personas tuvieron que auxiliar al único imputado por el crimen de Lupe Jiménez. En este sentido, la tesis que prevalecería es que no tiene sentido que hubiera abandonado prácticamente desnudo este escenario.

En cuanto a la pieza separada, el objetivo es que este nuevo indicio no afecte al procedimiento judicial principal, que prácticamente está concluido. El juicio con jurado se celebrará en la Audiencia de Pontevedra. Dado lo avanzado del procedimiento, no se descarta que se pueda señalar para antes de que concluya el presente año. El fiscal pide 20 años de prisión y mantiene que la víctima recibió unas 40 puñadas, doce de las cuales alcanzaron un área próxima al corazón.