La gestora negociará con Abanca, dueña del edificio, seguir de inquilinos
21 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La Cámara de Comercio podría mantener su sede en el edificio del Forcam, ahora propiedad de Abanca, que se lo adjudicó en subasta, en poco más de un millón de euros, hasta el traslado de la UNED a su nuevo emplazamiento en el antiguo Hotel Miño, según señalaron fuentes de la Xunta. A partir de ese momento sería necesario que le buscaran otra ubicación. Cabe recordar que la entidad cameral mantiene todavía tres empleados que no solicitaron la extinción de sus contratos y que siguen cubriendo su jornada laboral, pese a llevar más de dos años sin cobrar.
La permanencia o no de la sede de la Cámara de Comercio en su actual emplazamiento dependerá de su la comisión gestora llega a un acuerdo con Abanca. Fuentes de la Xunta señalaron a principios de esta semana que la comisión gestora no se había reunido todavía para analizar este asunto.
Una letrada, en representación de la gestora, sí que acudió el día de la subasta a las dependencias judiciales para conocer el desarrollo del proceso. Sin embargo, cuando llegó ya había sido adjudicado el edificio en menos de la mitad de la deuda, al no acudir ningún otro postor que Abanca, entidad con la que la Cámara había suscrito un crédito hipotecario para construir el macro edificio que estaba previsto destinar a formación.
Además de buscarle una salida a los trabajadores, aplazada por las dos sucesivas comisiones gestoras que llevaron las riendas de la entidad, también tendrán que tomar decisiones sobre los archivos de la Cámara de Comercio que están depositados actualmente en el Forcam. Fuentes consultadas señalaron que la UNED permanecerá en el Forcam al menos hasta septiembre, en que finalizará el curso.
Es posible que la decisión sobre el nuevo emplazamiento de la institución tengan que abordarlo los órganos de gobierno pendientes de formarse, después de unas elecciones que están todavía pendientes de convocar.
La Xunta admitió que Hacienda ya le había hecho llegar la relación de empresarios que pagaban el IAE a 1 de enero de este año. De él obtendrán el censo de electores y elegibles de las elecciones camerales, que llevan pendientes desde la dimisión de Luis Abelleira Mayor y su equipo, en septiembre del pasado año.
Abanca no tiene prisa por desalojar a los actuales inquilinos del edificio del Forcam, que estaban pagando 40.000 euros al trimestre de renta. Lo hacía hasta que el juzgado autorizó a la UNED a destinar parte del dinero a sufragar los gastos de mantenimiento, después de que les cortaran varios suministros, imprescindibles para seguir funcionando en el edificio. La entidad financiera no tendrá prisa de que se marchen, al menos hasta el momento en el que encuentre un comprador para el edificio de tres plantas y 2.351 metros cuadrados de superficie.
Apetitosa
Hubo un tiempo, y no hace mucho, en que había tortas por entrar en la Cámara de Comercio y, no digamos, para ser presidente. Hasta el ahora detenido Raúl López lo intentó, pero otras fuerzas más asentadas en la ciudad se lo impidieron. Eran otros tiempo, tanto de bonanza como de control férreo de Lugo. Hoy, la Cámara, es un marrón en toda regla y a nadie se le acuerda que hay trabajadores y extrabajadores implicados.