Un vecino de As Gándaras, guardia civil en Lleida, registra en Lugo una denuncia contra su teniente coronel
LUGO CIUDAD
Dirigida al ministro Morenés, tras sufrir un accidente en un servicio para el que cree que no reunía condiciones de salud
20 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Le faltan pocos meses para pasar a la reserva, se siente víctima de una injusticia y cree que con su proceder puede ayudar a otros compañeros. Por todo ello, Manuel Pena López, un lucense de As Gándaras, guardia civil especializado en telecomunicaciones, ha registrado días pasados en la Comandancia de Lugo una denuncia (dio parte, en lenguaje castrense), dirigida al ministro Morenés, contra el teniente coronel al frente de la Comandancia de Lleida, en la que está destinado. La iniciativa puesta en práctica por Pena López fue dada a conocer a través de la asociación Indignados Lucenses, cuyo estreno público fue con las gestiones realizadas para el realojo de la única inquilina de una de las casas demolidas en Paradai.
El citado guardia civil remite su denuncia directamente al ministro, como último eslabón en la cadena de mando. En opinión del denunciante, lo que relata es un presunto caso de delito contra la seguridad y la salud en el trabajo, del que responsabiliza al teniente coronel jefe de la comandancia de Lleida.
Baja médica
Según el relato que hace Pena, en junio del pasado año fue dado de alta médica tras sufrir un accidente; asegura que en la resolución médica se indicaba: «movilidad moderada». Pese a ello, se le asignó servicio, dice, sin ninguna prevención ni observación. Era un servicio dentro de su especialidad (telecomunicaciones), que incluía cargar ordenadores, pantallas, maleta de herramientas, etcétera. El denunciante considera que el mando incumplió «la orden dada por el ministro de Defensa al declarar la utilidad para el servicio con limitación para ocupar destinos que supongan bipedestación, marchas y deambulaciones prolongadas». Como consecuencia sufrió un accidente «que acarreó el ingreso hospitalario de tres días y una baja para el servicio que a fecha actual está en fase de curación».
Dado que las acciones que llevó a cabo siguiente la cadena de mando no dieron resultado, recurre ahora al propio ministro.
El denunciante hace público su caso porque cree que, como otros que han trascendido recientemente a los medios de comunicación, puede ayudar a que mejore la situación de quienes prestan sus servicios bajo disciplina militar.
Pena está de baja y en tres meses pasará a la situación de reserva. Este guardia es especialista en telecomunicaciones, que son, dice, su gran pasión. Además de los conocimientos que adquirió por sus propios medios, recibió formación especializada a cuenta de la Guardia Civil, incluida una estancia en Alemania. Entró en la Guardia Civil a los 18 años.
Primer paso
La asociación Indignados Lucenses se dio a conocer en su momento con su intervención en apoyo de la única inquilina que tenía uno de los edificios ruinosos demolidos en Paradai, para el desarrollo del plan de igual nombre. La casa tenía gravísimos problemas estructurales. La mujer consiguió ser realojada con un alquiler subvencionado por el Concello y logró una pensión Risga.