El personal del Balneario de Guitiriz solo atiende a los dueños, a la espera del juicio

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

GUITIRIZ

SUSO PENA

La fecha de la vista por la demanda de extinción de contratos se aplazó al día 18

05 jul 2017 . Actualizado a las 12:40 h.

Los trabajadores del Balneario de Guitiriz tendrán que permanecer un tiempo más de brazos cruzados. El juicio por la demanda colectiva de extinción de contratos, solicitada por los 27 empleados, ya no se celebrará el próximo jueves. Fue aplazado hasta el día 18, por una cuestión meramente administrativa.

La plantilla perdió la esperanza de que aparezca un comprador antes de que salga la sentencia que dictará el Juzgado Social número 2, que es el que se encarga de este caso. Son conscientes de que en el momento en el que quede libre de obligaciones de personal, posiblemente aparecerá un nuevo dueño.

Mientras esperan por el juicio y por la sentencia, los trabajadores cumplen su horario laboral y sus únicas ocupaciones son las derivadas de la atención a los dos únicos huéspedes del hotel, el matrimonio propietario. Las camareras de pisos siguen realizando la limpieza en sus habitaciones, les preparan la comida y les lavan y planchan la ropa. Todas estas tareas figuran en un contrato, como también recoge el derecho del personal al comedor.

Desde hace ya tiempo se acabaron prácticamente los víveres de la despensa y el personal ha tenido que poner un fondo para tener materia prima para hacer la comida. Ir a trabajar supone un gasto, el de desplazamiento, para estas 27 personas, que llevan sin cobrar sus salarios desde el mes de enero y sin actividad en la empresa desde la segunda semana de abril, en que se agotó el gasoil y tuvieron que cerrar la estación termal, con el consiguiente vaciado de la piscina.

La noticia que recibió ayer la plantilla del aplazamiento del juicio en unos días fue como un jarro de agua fría, dado que prolongará lo que definen como una agonía, sin fecha, al menos de momento. La representante sindical le ha pedido a los dueños que les firmen las vacaciones para poder ausentarse de los puestos de trabajo. No consiguió su pretensión.

Evitar el despido procedente

Mientras no haya una sentencia sobre la extinción de contratos tendrán que seguir acudiendo puntualmente al centro de trabajo. Tres ausencias injustificadas son causa para justificar un despido procedente, con la consiguiente pérdida de derechos. Hay trabajadores que empezaron en el Balneario de Guitiriz hace 14 años cuando el nuevo propietario puso en marcha las instalaciones.

Algunos miembros de la plantilla que encontraron trabajo no esperaron. Con las primeras nóminas pendientes se marcharon y fueron despedidos.

La plantilla lleva sin cobrar sus salarios desde el mes de enero de este año