Más de cien vecinos de Friol y Guitiriz asistieron en Quiroga a un oficio administrado por su antiguo párroco
19 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Un grupo formado por 117 vecinos de Friol y Guitiriz se desplazó ayer por la tarde a Quiroga en un autobús y en varios coches particulares para asistir a una misa oficiada por el sacerdote José Ramón Gómez García, que después de haber ejercido como párroco en estos municipios fue destinado por el Obispado de Lugo al sur de la provincia el pasado enero. El sacerdote se ocupa ahora de varias parroquias de Quiroga, Ribas de Sil y A Pobra do Brollón. Cuando el religioso llegó a la iglesia de la villa -hacia las seis y media- lo estaban esperando ante la puerta con aplausos y gritando: «¡Misa sí, con don Ramón!». Los antiguos feligreses del párroco quisieron de esta forma expresar su apego y su respeto hacia el religioso, pero los organizadores precisaron que no se trataba de un acto de protesta por el traslado.
Según explicó Vanesa López, una de las personas que promovieron el viaje, lo que se pretendía era que el sacerdote se sintiese arropado por los que fueron sus feligreses hasta hace poco tiempo. «Además, el nuevo párroco que enviaron para sustituir a don Ramón renunció hace una semana y ahora no tenemos ninguno, así que estamos dispuestos a ir a oír las misas donde él las oficie», añadió.
Donde sí habrá una concentración de protesta es en la localidad de Pedrafita, en Guitiriz, a las once de la mañana de hoy. Es ya la novena ocasión en que los anteriores feligreses de de José Ramón Gómez se reúnen -cada vez en una parroquia diferente- para pedir al obispado que lo devuelva a su anterior ocupación. «Esta vez lo volveremos hacer como lo vinimos haciendo hasta ahora, con tranquilidad, con educación y respeto», dicen los organizadores.
Sin resultado por ahora
Por el momento todas estas protestas no dieron ningún resultado, ni tampoco las cerca de 5.000 firmas que se recogieron entre los vecinos de las doce parroquias de Friol y Guitiriz que antes estaban a cargo del sacerdote. En el obispado no aceptaron estas firmas, por lo que fueron entregadas en la subdelegación del Gobierno. Pero los fieles no se desaniman. «Tenemos una pequeña esperanza de que el obispado nos escuche, porque nosotros también formamos parte de la Iglesia, y pensamos seguir insistiendo», dice a este respecto Vanesa López. «Aunque los que organizamos hasta ahora estos actos dejásemos de hacerlo, la gente seguirá reclamando que nos devuelvan a nuestro párroco», añade.
Los feligreses de Friol y Guitiriz, indica por otro lado Vanesa López, no están dispuestos a aceptar a ningún otro párroco que no sea José Ramón Gómez, excepto cuando se trata de asistir de las misas de aniversario y de funerales que ahora son oficiadas provisionalmente por sacerdotes de parroquias colindantes. «Él se ha desvivido por nosotros mientras fue nuestro párroco y ahora nosotros nos desvivimos por él», señala Vanesa López. «Lo queremos porque es muy buena persona, colabora con todo el mundo y trata de la misma manera a todos los feligreses, además de que ayuda a la gente mayor a volver a su casa después de asistir a la misa y de que se ocupa de acompañarlos al centro de salud y de ir a buscarles las medicinas a la farmacia sin que nadie se lo pida», agrega.