La familia de Tatiana Vázquez pide protección si Ibrahima sale de la cárcel
CASTRO DE REI
Sus allegados creen que la joven estaba presionada y el día del crimen rompió con él
25 abr 2016 . Actualizado a las 22:29 h.La familia de Tatiana Vázquez Abuín, la joven de Castro de Rei que fue asesinada la madrugada del nueve de abril en el barrio lucense de San Fiz, sigue conmocionada y continua sin asimilar lo sucedido. Sospecha de que Ibrahima, el único detenido tras el asesinato, es el autor de los hechos y si no es directamente, está implicado en el crimen. Por eso, los familiares temen que salga de la cárcel y, en el caso de que lo excarcelen, adelanta que pedirá protección. «Temos nove mastíns na casa e dígoche que fan falta. Non sabes o que vai pasar. O día que o saquen do cárcere, temblamos. É un perigo, si non é él, manda».
En cuanto al amigo dominicano de Tatiana, creen que este no está relacionado con su muerte. Recuerda que el primer día que le tomaron declaración estaba temblando. «Non cremos que fose él. Non ten sentido. Pretende salir con ela e mátaa. Sinceramente non o creemos», indican los allegados, quienes insisten en que hablan por hablar ya que ellos nada saben con certeza.
La familia de la joven insiste en que nada sabe acerca del crimen, que las cosas no están claras y que todo lo que conocen es a través de los medios de comunicación. Aún así manifiestan que no le coinciden los datos y hasta que hablen los forenses o el juez, nada se creen.
«Non nos cadra o feito de que tivera pensado ir a vivir con él. Unha, porque o venres anterior fumos poñer unha denuncia pola desaparición dos nosos coches e Tatiana asinou conforme a que estaba de acordo», relatan los allegados quienes también niegan que la pareja estuviese viviendo junta porque la joven iba todos los días a quedarse a su casa de Duancos y tenía toda su ropa guardada en los armarios.
El día de su muerte sorprendió no ver el ZX delante de la puerta de casa. Sus padres le habían advertido de que dejase el coche cerca de la vivienda y no en un garaje que tienen junto a las cuadras, a unos metros de la vivienda. «Non o deixes alá arriba que te poden estar esperando», le decía la familia, quien concluye diciendo que sospecharon que algo malo le iba a pasar estando con Ibrahima Ndiaye.