El empresario está agradecido de las múltiples muestras de solidaridad recibidas de sus vecinos el pasado domingo
02 jul 2015 . Actualizado a las 10:58 h.Han pasado cuatro días desde el incendio que calcinó por completo el taller y concesionario Renault de Becerreá, y su propietario, José María Díaz, se ve envuelto en un mar de emociones y trabajo para intentar seguir adelante. Por un lado, debe asumir la desgracia y averiguar cuáles fueron las causas y, por otro, emplearse a fondo para reabrir el taller. Y en medio de todo ello, surge la solidaridad: «Se algo podo sacar de bo nesta desgraza é que a xente é máis boa do que un pode esperar», afirma emocionado.
Reapertura
«Sei que pode soar a tópico, pero é a realidade; estou moi agradecido á rapidez coa que actuou o concello e os veciños, aínda sendo domingo, ao alcalde, ao tenente de alcalde, ao GES de Becerreá... todos se empregaron a fondo», aclaró el empresario.
Y esa solidaridad no acaba ahí. Díaz tiene previsto reabrir el negocio en un local que tiene a unos 300 metros del que resultó calcinado: «Estámolo acondicionando para poder atender as principais necesidades dos nosos clientes», comentó ayer, «e a solidariedade estanos axudando, porque non nos quedou nada, así que uns préstannos un elevador, outros unha pluma...».
En cuanto a las causas del incendio, la Policía Científica continúa investigando. El martes, tanto el dueño como los agentes pudieron acceder al interior de la nave, y ayer volvieron a entrar para seguir analizando los restos. «É incrible que aínda hoxe [por ayer] queden restos de papeis con algo de fume», explicó José María Díaz.
Todo calcinado
Dentro, no quedó nada: «Está todo incinerado, calcinado, ¡non hai nada! Intúense algunhas formas, pero son todo cinsas», se lamentaba ayer el empresario. Por ahora, los policías no han adelantado cuáles pueden ser las causas «porque cada coche é un sospeitoso, e había 21 vehículos dentro». Lo que sí es evidente es que la estructura de la nave está muy dañada y que no han logrado salvar nada de lo que había en su interior.
josé m. díaz dueño del concesionario calcinado en becerreá
«É incrible que aínda hoxe queden restos de papeis con algo de fume»