Los socialistas de Lugo muestran al PSOE el camino de salida del atolladero

enrique g. souto lugo / lA voz PULSO LUCENSE

LUGO

26 feb 2017 . Actualizado a las 19:31 h.

«El futuro no va a ser dominado por aquellos que están atrapados en el pasado». No es seguro que el presidente de la Diputación, Darío Campos, conozca el aviso hecho por el socialdemócrata Willy Brandt (Lübeck, 1913-Unkel, 1992), pero actuó como si lo conociera. Y no menos lo hizo el ya vicepresidente de la Diputación, Manuel Martínez, hasta ahora diputado no adscrito y socialista proscrito. Ambos, con el concurso necesario de otros, han dado una lección al quebrantado PSOE español, han encendido una luz en el oscuro camino del partido de Iglesias Posse hacia su reinvención. En Lugo, una vez más laboratorio político, se ha ensayado con éxito, momentáneamente al menos, la sutura de heridas que parecían incurables en el cuerpo socialista.

Todo está aún muy reciente, todo acaba de ocurrir en este retorno de Martínez al grupo socialista y al gobierno de la Diputación. Andando las semanas pueden pasar muchas cosas. Pero lo cierto es que, a día de hoy, el PSOE ha recuperado a uno de sus más sólidos representantes en la provincia. Desbarata así, o deja muy limitada, la operación que, como reconoce Martínez, estaba en marcha para crear una red de candidaturas independientes en varios municipios que, muy probablemente, tendría repercusión en la Diputación.

El presidente Campos habló de «generosidad»; sí, un acuerdo como el que sitúa a Martínez en la vicepresidencia de la Diputación exige generosidad por parte de algunos. Pero, más que nada, se trata de supervivencia. O volvía Martínez o al PSOE se le acababa el recorrido en la Diputación. Y aún así, está por ver. En la capital, con Lara Méndez, las perspectivas electorales no son brillantes para los socialistas. Solo otra fatal cadena de errores en el PP lucense volverá a situar en la alcaldía a Méndez, salvo que la socialista cambie el paso en la segunda mitad del mandato. La suma de brindis al sol no gana elecciones. Tampoco, por lo que atañe al PP, los liderazgos apáticos.

El PSOE lucense decidió dejar de estar atrapado en el pasado. Si cierra el retrovisor, como afirmó Campos, le será innecesario recordar que «las barreras mentales por lo general perviven por más tiempo que las de hormigón», que dijo WB.