Un hombre de 83 años muere de frío tras salir de su coche, que cayó en una tajea

X.M. Palacios / Tania Taboada LUGO

LUGO

Una vecina lo halló aún con vida, pero falleció en la ambulancia. Ocurrió de madrugada en la carretera que une A Pastoriza con A Pontenova

07 mar 2016 . Actualizado a las 22:40 h.

Un vecino del municipio lucense de A Pastoriza, José Seco López, de 83 años, murió en la noche de ayer a consecuencia de una hipotermia que sufrió al salir del coche en el que viajaba, que había caído en una tajea. El cuerpo -que estaba al lado del turismo, un Peugeot 306- fue hallado pasadas las ocho de la mañana de ayer por una vecina. Cuando fue descubierto, se encontraba todavía con vida.

De inmediato se avisó al 112, y al lugar de desplazó una ambulancia. Sin embargo, el hombre falleció mientras era trasladado al Punto de Atención Continuada (PAC) del cercano municipio de Meira.

El cuerpo estaba en una pista del municipio, en la parroquia de Gueimonde, a varios kilómetros de Bretoña, localidad donde residía. El vehículo se salió de una carretera local, se metió por la vía de acceso a una vivienda, y el conductor, al ver que no podía continuar, inició una maniobra para dar marcha atrás.

En esa maniobra la parte trasera del coche cayó en una tajea. Parece que al darse cuenta del golpe, el conductor salió del interior del vehículo, e intentó levantar el coche del lugar al que había caído; sin embargo, cayó él también, y ya no pudo levantarse. El cuerpo estaba junto a la parte trasera del turismo, sin heridas, y ya en un primer momento se barajó la hipótesis de la hipotermia como causa del fallecimiento, con lo cual no se trata de una muerte por accidente de tráfico.

Las malas condiciones meteorológicas de la noche, con temperaturas que apenas superaron los cero grados en el interior de la provincia y con un porcentaje de humedad cercano al 100%, ayudan a entender que el fallecido hubiese padecido hipotermia.

El hombre fue encontrado por la dueña de la casa a la que había llegado tras meterse por la pista de acceso. La mujer -que acudía a atender a las vacas de su explotación, como hace habitualmente- no duerme en ese inmueble sino en otro, situado a varios kilómetros, por lo que hasta la mañana no pudo darse cuenta de lo que había ocurrido. En las inmediaciones de esa vivienda hay otras casas, que forman el barrio de Ramalleira, pero ninguna está ya habitada.

Aunque su salud se había ido deteriorando en los últimos tiempos, el fallecido vivía solo y conducía habitualmente, pero además era habitual verlo en diversos lugares del municipio. Por las noches solía acudir a casa de unos vecinos que viven cerca, aunque pese a la proximidad usaba habitualmente el coche para ir de una vivienda a la otra. Anteanoche no fue a visitarlos, si bien en esa casa se comentó que seguramente había decidido no salir por el mal tiempo.

El cuerpo fue trasladado ayer a un tanatorio de A Pastoriza, y el entierro se celebrará esta tarde, a las seis menos cuarto, en la parroquia de Bretoña.

Nieve en las montañas

Por otra parte, la nieve dificultó el tráfico en algunas zonas de la montaña lucense y ourensana, aunque sin incidentes de relevancia y sin que tampoco fuese necesario cortar la circulación. La Guardia Civil se desplazó a primera hora de la mañana hasta una zona alta del municipio de Laza, con el fin de atender a un vecino de Campobecerros que había pedido ayuda sobre las seis y media de la madrugada preocupado por la presencia de nieve, dado que tenía que acudir a un centro médico para una sesión de hemodiálisis.