Murales de autor a salvo del vandalismo

LUGO

OSCAR CELA

Es el segundo encargo de Concepto Circo, representantes de una generación de arte urbano, para paredes exteriores 

14 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Teresa López Gradillas, la titular de la farmacia de Otero Pedrayo, esquina a Río Eo, quería embellecer las dos fachadas de su negocio, que habitualmente eran blanco de pintadas de todo tipo. Optó por contratar a Concepto Circo que, junto con Outro Prisma, son los dos exponentes de arte urbano de la ciudad más conocidos. Los resultados no la decepcionaron sobre todo porque, si se cumple el código no escrito del colectivo de grafiteros, sus muros estarán ahora a salvo de las pintadas.

La decisión para ponerse en contacto con Concepto Circo ?Manuel Pallín y Marcos Pereira? la tomó después de ver casi todos los días el mural que está en la plaza Conde Fontao, en la estación de tren. Localizó a los artistas a través de Internet y les pidió que le hicieran un trabajo que identificara la farmacia. «Confié plenamente en ellos ?confesó la profesional? y no me decepcionaron. El resultado me encantó. Son unos artistas y su trabajo debía estar mejor valorado». La boticaria les pidió que representaran el trabajo en un negocio de este tipo y a sus protagonistas, titular y auxiliares.  Aunque les pidió que la figura humana no se identificara con ella, ciertamente tiene un gran parecido.

Acuerdo económico

Artistas y empresaria llegaron a un acuerdo económico y el día en que estaba previsto que los primeros se pusieran manos a la obra con sus espray de colores, Teresa López Gradillas se encontró el trabajo ya hecho cuando acudió a abrir la farmacia.

Cuando los artistas urbanos estaban enfaenados en su trabajo,  tratando de plasmar el encargo de la farmacéutica, recibieron la visita de la Policía Local. Los grafiteros mostraron a los agentes la comunicación de obra menor que habían presentado en el Concello. «Para poder hacer encargos como este ?señalaron fuentes de Concepto Circo? hay que hacer los mismos trámites que para pintar una fachada: contar con el permiso de la comunidad de vecinos y respetar los colores establecidos». 

En un barrio deteriorado

Para Concepto Circo el mural de Otero Pedrayo es el segundo que realizan en paredes exteriores. El anterior lo pintaron en una clínica de Marina Española, hace años. Hicieron otros encargos en el interior de locales comerciales, puertas de  tiendas y de garajes. 

  Manuel Pallín reconoció que la pared en la que plasmaron el mural en Otero Pedrayo estaba muy deteriorada, en consonancia con el propio barrio. Admitió que el hecho de que ellos hayan realizado este trabajo supone, generalmente, que no vayan a ir otros grafiteros a pintar encima. «La gente no suele hacer firmas donde ya trabajaron otros. No es seguro al cien por ciento, pero si en un alto porcentaje». 

El integrante de Concepto Circo reconoció que les han aparecido tachados algunos trabajos, aunque no suele ser habitual. Según dijo, en esos casos se comprometen a reparar los daños. «Quien hace pintadas reivindicativas ?apuntó? suele elegir una pared blanca».

Para poder pintar el mural tuvieron antes que dar una capa de pintura blanca a las paredes. El resto del trabajo lo hicieron con los espray. «Lo que lleva más tiempo ?señaló Pallín? es hacer los diseños y preparar los bocetos, plasmarlos es más rápido»

Las pinturas que usan son, según señaló, de gran calidad, el exponente de un mercado que incorpora periódicamente versiones mejoradas. Las actuales tienen una vida media de entre seis y siete años. Los artistas, según dijo, se comprometen a al mantenimiento de los dibujos en buenas condiciones.