Asegura desconocer en qué criterios se apoyó la Xunta para variar el trazado
05 feb 2016 . Actualizado a las 12:56 h.El trazado del Camino Norte, variado en algunos lugares por la Xunta, sigue generando polémica. Las modificaciones saltaron a la luz en el 2014, y fueron causa de un rechazo patente entre asociaciones, vecinos y hasta municipios gobernados por el PP: el caso más evidente fue el de Antonio Muíña, que entonces ocupaba la alcaldía de Friol y que no se presentó a la reelección en mayo de este año tras más de veinte años presidiendo la corporación.
El PSOE ha retomado hoy las críticas, y la diputada lucense Concepción Burgo ha asegurado, en el Parlamento gallego, que desconoce en qué criterios se apoyó la Xunta para introducir esas modificaciones. Según la parlamentaria,, el trazado delimitado a principios de los 90 por la Xunta, contaba con un informe del historiador Izquierdo Perrín. «Temos a impresión de que a Xunta optou por un cambio sen un estudo realmente serio», dijo Burgo.
Modificaciones en varias zonas
Las modificaciones del Camino Norte en Galicia empiezan ya nada más entrar en la comunidad. Mientras la variante que llega por Ribadeo sigue el trazado delimitado por Barreiros y Lourenzá hacia Mondoñedo, la que bordea el Eo desde Asturias y lo cruza en Abres sigue por Trabada pero no confluye, como antes, con la otra en Vilanova de Lourenzá sino en la ciudad epìscopal. La subida de Mondoñedo a Abadín también ha variado al introducirse una variante más al oeste, igual que se han modificado el paso de la ruta por el municipio de Friol y su confluencia con el Camino Francés, que ahora queda fijada en las inmediaciones de Lavacolla. De todos modos, en algunos lugares el anterior trazado del Camino, declarado Patrimonio de la Humanidad el pasado mes de julio junto con el Primitivo, se mantiene como itinerario alternativo.