Renfe suprime la conexión a Bilbao por no adelantar 5 minutos la salida del nuevo Alvia
LUGO
Solo será posible viajar al País Vasco en tren desde Lugo haciendo una espera de dos horas en Monforte
28 ene 2016 . Actualizado a las 16:11 h.Los nuevos cambios ferroviarios introducidos por Renfe en la provincia de Lugo a partir del próximo lunes no dejan de provocar las quejas de los usuarios. Queda tan solo hasta el domingo abierta la venta de billetes desde Lugo para Bilbao, Irún y Hendaya y viceversa. A partir del lunes la compañía la suprime y quien quiera viajar a o desde el país Vasco ha de comprar pasajes por separado hasta Monforte y desde esta estación al destino que se desee. Esta situación se subsanaría, o bien dejando el horario de salida que tiene ahora el Alvia (10.57) o bien retrasando cinco minutos la nueva salida a partir del lunes, que será a las 11.10. Así garantizaría el enlace en Monforte que ahora ya no se oferta.
No hay conexión directa de Lugo al País Vasco porque Renfe la suprimió hace ya varios años. Sin embargo la compañía vendía hasta ahora billetes haciendo transbordo en Monforte. Quiere esto decir que cualquier incidencia que se pudiera producir en el trayecto desde Lugo hasta la estación monfortina era asumida por la empresa. Si el tren de Lugo se retrasaba, el de Vigo a Bilbao-Hendaya, aguardaba en Monforte. Eso ocurría tanto a la ida como a la vuelta.
Pero desde el lunes, Renfe ni tan siquiera ofrece esta posibilidad. Cerró la venta de billetes y eso que podría seguir despachándolos porque, al regreso, el tren de Bilbao llega mucho antes que el Alvia a Monforte, que es el que habría que tomar para llegar a Lugo.
Transbordo
El tren Vigo-Bilbao/Hendaya y viceversa, que es el que daba servicio a Lugo, sigue operativo. Si un viajero con origen o destino en la estación lucense quiere utilizarlo, asume por su cuenta los enlaces y a la ida tendrá que hacer una espera de más de dos horas en Monforte. Deberá utilizar el Media Distancia, pensado para conectar en Monforte con el Alvia que va a Barcelona, que sale de Lugo a las 8,55 de la mañana y aguardar desde la llegada, a las 9.52 hasta las 12.08, que es cuando sale el Intercity del País Vasco. El nuevo Alvia llega a Monforte a las 12.03, es decir cinco minutos antes de la salida del otro convoy. Renfe debe estimar que no da tiempo al cambio y, por eso, suprime la venta de billetes. Solución: adelantar la salida del Alvia de Lugo cinco minutos.
A la vuelta, el Intercity llega a Monforte a las 18.06 y el Alvia a las 18.33. Hay tiempo de sobra para hacer el cambio, pero Renfe suprimió el enlace. La empresa se cargó el servicio por los 13 minutos que hay de diferencia en la salida actual del Alvia (10.57) y la que le fijaron a partir del lunes (11.10). Viajeros que usan el Intercity mostraron ayer su asombro por la decisión y explicaron que se unía al maltrato al que somete Renfe a la conexión Galicia-Euskadi. Llegar de Lugo a Bilbao lleva más de nueve horas y medio en un tren con material rodante que ya no se usa en otros lugares.
Inaudito
Que se suprima una conexión ferroviaria por no adaptar el horario de un tren que circula por una línea que no tiene tránsito resulta cuando menos inaudito. Pero esa es una decisión de Renfe y está en la misma línea que la de «promocionar» un tren a Madrid fijándole el precio más caro de todo el norte peninsular y, además, al triple de una de las ofertas estrella de la empresa de autobuses. No hay duda, Renfe espanta a los viajeros quitándoles servicios, tardando nueve horas y media en llegar a Bilbao y encima con precios de AVE.
La Plataforma reclama entrevistas con la ministra y el presidente de la compañía
La Plataforma Lugo... Non perdas o tren envió burofaxes a la ministra de Fomento, al presidente de Renfe y al presidente de la Xunta para pedirles una entrevista en la que tratar la situación ferroviaria de la ciudad. La solicitud va acompañada de una exposición en la que el colectivo recuerda la situación generada con la «mutilación» del Alvia.
El colectivo muestra sus sospechas de que el cambio esconde el futuro cierre de la conexión diurna con Madrid aludiendo falta de rentabilidad y desviándola a Santiago «para favorecer esa ruta». También hace referencia al trato discriminatorio con el precio de los billetes. Los precios del Alvia, 30 euros, son superiores a los del autobús y a otros que Renfe aplica para otras ciudades gallegas.
«Con todo esto, de poco nos valen las palabras de la ministra de Fomento, Ana Pastor, que en Lugo, y al inicio de la campaña electoral de diciembre de 2015 prometió que la ciudad tendría un ferrocarril propio del siglo XXI y aclaró, por si quedaban dudas, que sería el tren de alta velocidad Lugo-Ourense», dicen las cartas. Añaden que a Lugo se le prometió una estación intermodal» en la que se hizo ya una fuerte inversión «y ahora está paralizado el proyecto, cuando es sumamente necesario».