El «show» con canciones del grupo sueco fue parado por el edil de Cultura
19 oct 2015 . Actualizado a las 20:09 h.El espectáculo que iba a repasar en Vilalba, anteanoche, los 40 años de la trayectoria musical de Abba no duró ni media hora. Se calculaba que el público pudiese disfrutar durante aproximadamente hora y media; pero lo que podría ser (hablando en términos más analógicos que digitales, de cuando el vinilo reinaba sin que se hubiese inventado el cedé) el equivalente a un disco doble de grandes éxitos se quedó en algo así como un maxisingle o un minielepé, apenas un apenas un aperitivo cuando se intuía un copioso banquete.
La corta duración del espectáculo fue decretada por el concejal de Cultura, José Antonio Pita, molesto por la calidad de lo que se representaba en el escenario. Tras haberse interpretado cuatro o cinco canciones, Pita consideró que el espectáculo se desarrollaba «moi mal», con una calidad «horrible», alejada de lo que se esperaba.
El edil reconoció ayer sus sorpresa por lo ocurrido. Explicó que cualquiera que hubiese visto la documentación enviada al Concello de Vilalba, se habría fiado de la compañía y habría colaborado. La actuación no estaba organizada directamente por el Concello, que sí cedió el Auditorio Municipal para el espectáculo y que sí se sintió obligado a intervenir. Pita afirmó que su deber era «velar» para que cualquier representación en instalaciones municipales tuviese una calidad mínimamente aceptable. «Teño que defender os intereses dos veciños», dijo.
Mal sonido o mal vestuario fueron algunos detalles que el concejal apreció durante la actuación, a la que asistieron, dijo, unas 200 personas. Luego advirtió que tras el escenario algunos artistas no querían salir a actuar porque no sabían las canciones. Pita acabó por averiguar que la compañía se había formado casi de prisa y corriendo, solo unos días antes de la representación.
Contactó con el empresario, que se había desplazado a Vilalba, al que la recriminó la mala calidad del show. El promotor de respondió que era suficientemente bueno para la localidad, y Pita le replicó preguntándole si sabía qué compañías habían pasado antes por el auditorio.
El malestar, de todos modos, no ha desencadenado acciones concretas, que podrían estudiarse en la sesión del martes de la junta de gobierno. Lo que sí tiene claro Pita es que si se repitiese la situación, actuaría igual.