Feijoo pone alas a la campaña del PP al sugerir una gran inversión en Rozas

Enrique G.Souto

LUGO

OSCAR CELA

Pide el voto a los socialistas que quieren recuperar el espíritu de la Transición

20 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

«Estamos moi cerca, e non podo dicir máis, moi cerca de pasar páxina, quedan moi poucos votos para conseguilo». Lo dijo ayer el presidente del PPdeG y de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, en el mitin central de su partido en la capital, en el que, además del candidato, Jaime Castiñeira, participaron la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, y el presidente provincial de los populares, José Manuel Barreiro. Mientras, fuera del auditorio de Veterinaria, un grupito de estudiantes coreaba consignas contra la política educativa de la Xunta. Feijoo se mostró convencido de que más pronto que tarde habrá una ley electoral que establecerá que los alcaldes y presidentes de diputaciones los elegirán los vecinos y no los concejales ni, en el caso provincial, los diputados. Ni siquiera hace falta una ley, remachó, solo un acuerdo para que gobierne la lista más votada.

Feijoo recordó en Lugo la inversión comprometida en el aeródromo de Rozas y recomendó a los asistentes que estén atentos porque en los próximos días habrá alguna noticia relevante al respecto de lo que será la mayor infraestructura en materia aeronáutica en Galicia. Ironizó recordando aquellos años en que «Pepiño Blanco anunciaba inversiones en Rozas que nunca se materialización.

Feijoo dijo que el PSOE dejó de ser un partido con un proyecto nacional y ahora está dispuesto a pactar con la extrema izquierda; por eso, animó a los votantes socialistas disgustados con el camino seguido por el PSOE a optar por el PP. De las mareas, señaló: «Os partidos con asesores do goberno venezolano non van traer moita cousa para aquí».

La ministra Báñez recordó la evolución en la creación de empleo, sostuvo que en este año se crearán 600.000 nuevos empleos, de ellos 5.000 en la provincia de Lugo. Resaltó que con el PP las pensiones no solo no se tocan a la baja, sino que suben. «El estado de bienestar es intocable», afirmó.

Por su parte, Barreiro, que precedió al candidato, caldeó el ambiente con un recuerdo inicial al fundador del PP, Manuel Fraga. Castiñeira, a su vez, dijo que sus promesas son un contrato con los lucenses y que Orozco solo piensa en ir a Senado.