Roban carne en una casa de Xermade mientras las dos residentes estaban en cama

Xosé María Palacios Muruais
xosé maría palacios VILALBA / LA VOZ

XERMADE

La sustracción afectó también a una construcción próxima, en la que se cogió la escalera usada para entrar en la vivienda

28 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una casa de la parroquia xermadina de Miraz, habitada por dos hermanas de edad más bien avanzada, sufrió en días pasados dos robos, aunque solo el segundo de ellos acabó con un botín que se llevaron los ladrones. La carne de la matanza realizada hace varias semanas, que se guardaba en un congelador, fue a parar a manos ajenas, mientras las dos mujeres estaban ya acostadas.

El primer robo se cometió sobre las cuatro de la tarde. En ese momento no había nadie en la vivienda, puesto que las dos mujeres estaban partiendo leña en los alrededores. Al volver a casa, se dieron cuenta de lo ocurrido, aunque el robo resultó infructuoso, ya que la carne acabó junto a una carretera próxima. El autor o los autores entraron por la puerta principal de la vivienda.

Dos días después, en cambio, el robo terminó con un botín más concreto y sustancioso, puesto que la carne guardada en el congelador acabó desapareciendo. En el congelador se almacenaban diversas partes de dos cerdos sacrificados en semanas pasadas. Fue lo único que se echó en falta en la vivienda, en donde el ladrón o los ladrones actuaron con sigilo y hasta cierta educación, puesto que el paño que cubría el congelador quedó de nuevo en su sitio tras el robo.

Ese segundo robo se cometió en las primeras horas de la noche, dos días después del primer robo que resultó finalmente frustrado. A la vivienda se accedió por una ventana de la parte posterior, y para ello se utilizó una escalera cogida en una casa de al lado que no está habitada habitualmente. Las dos mujeres ya se habían acostado, y ni siquiera se dieron cuenta de lo que pasaba porque la carne se guardaba en la zona inferior de la casa. Ninguna otra habitación de la casa fue desordenada o desvalijada.

La escalera cogida en una casa vecina no fue, sin embargo, lo único que en ese edificio interesó al autor o autores. En la casa había pan, ya que los propietarios, que viven en un edificio situado a unos cien metros aproximadamente, cuecen periódicamente. En la casa había varios bollos, elaborados recientemente.

Sin pistas

Ni las dos mujeres ni otros vecinos tienen pista alguna sobre el autor o los autores, ya que en esa zona de la parroquia quedan pocas casas habitadas de modo permanente. La zona en la que se cometieron las sustracciones, con fácil salida hacia el vecino municipio de As Pontes, favorece la huida. En la localidad pontesa, en los últimos días, hubo robos en algunas casas.

 

Precedentes en zonas próximas

No es la primera vez que en otras parroquias relativamente cercanas a Miraz se llevan a cabo acciones como las de estos días pasados. En otras parroquias de Xermade hubo robos con un botín similar, consistente en carne de la matanza y en otros alimentos. En Santaballa, hace meses, hubo un robo similar, que no se cometió dentro de una vivienda sino en un alpendre próximo a la casa.

Lo ocurrido ha generado preocupación en la zona, al tratarse de sucesos que se repiten.

De este asunto se habló en la reunión que el Consello de Maiores de Momán celebró el domingo. En el encuentro se aconsejó extremar la precaución con desconocidos que telefonean o acuden a las casas ofreciendo productos.