El polémico cierre del campamento de Parga es provisional y se cambiará

x.m.p. vilalba / la voz

LUGO

FOTO CEDIDA

El Ejército de Tierra sustituirá la alambrada por otro material, y asegura que el anterior perímetro estaba deteriorado

28 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

La alambrada colocada como cierre en el campamento militar de Santa Cruz de Parga (Guitiriz) es «provisional» y se cambiará más adelante. Por ahora, de todos modos, no parece haber una fecha fija para esa sustitución, aunque sí voluntad de realizar el cambio «en cuanto haya disponibilidad de dicho material».

Esa es la intención del Ejército de Tierra con respecto al citado campamento, cuyo cierre ha generado polémica en las últimas semanas, hasta el punto de que la comunidad de montes de la parroquia convocó una reunión por este asunto en días pasados y de que el BNG iba a presentar una moción de rechazo en el pleno previsto para anoche.

El «importante deterioro» del anterior cierre y la necesidad de mantener en las instalaciones el «adecuado grado de seguridad» de las personas, tanto las del interior como las de fuera, llevaron al Ejército a realizar ese cambio. La instalación de las concertinas causó un evidente rechazo en el entorno; pero se trata de material «reglamentario» en esa institución y solo se ha colocado en la zona del perímetro que tiene acceso a los campos de tiro y de explosivos.

Aviso al entorno

Con esa instalación, según el Ejército, se buscó en el entorno un efecto disuasorio, de modo que quedasen «plenamente» advertidos los que se acercasen al límite del campo de tiro o entrasen en las instalaciones.

Por otro lado, fuentes del Ejército aseguraron que ya en marzo se habían reunido con responsables municipales de Guitiriz para explicar los motivos de esta actuación, que se hizo para «preservar» la seguridad de las personas y para evitar cualquier situación de «claro riesgo».

La alambrada se ha instalado sobre un saliente vertical, merlón, que en algunos casos presenta una altitud superior a 1,60 metros.