El primer emplazamiento fue en un edificio adosado a la Muralla
01 oct 2014 . Actualizado a las 05:08 h.La farmacia La Salud, una de las más antiguas de Lugo, la número tres, que hoy empieza a funcionar en el número 1 de la rúa do Teatro, estaba emplazada en un edificio del siglo XIX, historicista de base ecléctica, uno de los pocos ejemplos que se conserva en Lugo. Su autor es desconocido. Así figura en la «Guía da arquitectura de Lugo», publicada por el Colegio Oficial de Arquitectos, durante la etapa en la que fue presidente del colectivo Alberte González.
Cristina Fente, la propietaria de la botica desde hace dos meses, reconoció que su traslado a la que será su tercera ubicación desde el año 1936 en que montó La Salud Manuel Mazoy, obedece a las obras de rehabilitación a las que someterán al edificio. Se muda desde la que se conoce como Casa Ayala en el inventario arquitectónico de Lugo, al antiguo edificio en el que funcionaba Calzados Doval.
Fente señaló que el emplazamiento en el que empezará a funcionar hoy será el definitivo, dado que no tiene previsto volver para la Rúa do Teatro número 6, después de la reforma.
El primer emplazamiento de la botica fue la actual Ronda da Muralla (antes Ronda dos Caídos) en un edificio adosado a la muralla romana. Fue expropiado en los años 70, cuando liberaron el monumento de casas. De delante del establecimiento salía y llegaba la carrera de motos de San Froilán.
Los actuales dueños de la casa de Ayala no tienen previsto llevar a cabo la reforma del edificio a corto plazo, según aseguraron recientemente fuentes próximas a la familia. Además, la primera planta de la emblemática casa está habitada por un conocido empresario lucense, que es copropietario del inmueble.
Las características especiales del edificio, que está sometido a catalogación por su singularidad, harán que la reforma tenga que ceñirse posiblemente a las características actuales.
La mudanza
La actual titular de la farmacia ultimaba ayer los detalles del traslado a su nueve ubicación. No abrió las puertas al público.
La boticaria no se llevó todo el mobiliario, sino que una parte lo pondrá a la venta.
Figura entre estas piezas el mostrador de madera maciza y las escaleras que conducen a la entreplanta, que era dónde estaba parte del almacén de la botica.
crónica traslado de un negocio emblemático
La boticaria puso a la venta parte del mobiliario de las viejas instalaciones