El BNG de Guitiriz denuncia el impacto «brutal» de cortas de árboles en orillas de ríos

vilalba / la voz

LUGO

30 ago 2014 . Actualizado a las 18:00 h.

La situación creada por cortas de árboles en orillas fluviales de Guitiriz ha desatado fuertes críticas del BNG, que considera que se está produciendo un impacto «brutal» en algunas zonas sin que se aplique, por el contrario, medida alguna para minimizar esas consecuencias. «Estase a destruír a contorna do río», dijo ayer el concejal guitiricense del BNG, Xosé Lois González Souto.

El edil nacionalista manifestó ayer que las consecuencias resultaban especialmente evidentes en las márgenes del río Parga, en un tramo comprendido entre la zona del Pitero y el puente de San Alberte. Para el BNG guitiricense, es obligatorio preguntarse qué clase de seguimiento se está efectuando ante las obras, que promueve la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil.

A la vista de lo ocurrido, explica González Souto, el BNG estudia la posibilidad de acudir a otros organismos para alertar de lo que ocurre en el citado río y en otros que discurren por el municipio. El Bloque no solo critica la forma en que se han realizado algunas talas sino también otras operaciones: por ejemplo, denuncia que hay madera tirada por el río y que algunos tractores han llegado a meterse en el agua para cargar madera. Por todo ello, el grupo nacionalista se dirigirá a los organismos implicados para pedirles que tomen medidas y remedien el actual «despropósito».

De todos modos, el BNG advierte de que no son estos los únicos problemas relacionados con el estado de los ríos de Guitiriz, y pone de manifiesto lo ocurrido el pasado fin de semana, con la muerte de decenas de truchas en un tramo del río Forxá próximo a Sete Muíños. Vecinos de la zona advirtieron lo que ocurría, y pescadores del municipio acabaron avisando a la Xunta, que mandó técnicos para inspeccionar la situación.

Fallos «cada vez que chove»

El concejal del BNG asegura no extrañarse de episodios como ese, y critica el estado de la red de sumideros próximos al citado río. González Souto subraya que aparecen los problemas «cada vez que chove cunha mínima intensidade», sin que el gobierno local, dice, haga nada «para evitalo».