El historiador Xabier Moure y un vecino de Rao localizan la octava estación rupestre de Cervantes, esta vez en O Pando
07 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El historiador Xabier Moure sigue en su proceso de encontrare nuevos hallazgos rupestres en la comarca de Os Ancares y esta vez ha tenido la estimable colaboración de un vecino de Murias de Rao, José de Vilarín, para encontrar la octava estación prehistórica de Cervantes y, definida por el propio Moure, como la más espectacular «pola cantidade de cazoletas e a súa situación nun outeiro rochoso que domina toda a contorna».
El hallazgo de los petroglifos fue en el monte denominado O Teso do Acevedo, a 1.364 metros de altitud y perteneciente a la aldea de Poso, en la parroquia de O Pando, en el municipio de Cervantes. Moure explica las características del nuevo hallazgo rupestre en Os Ancares: «Está distribuído en cinco penas, onde se poden observar máis de cen cazoletas. A pena máis grande, horizontal, ten unhas medidas aproximadas de 15 por 15 metros e ten gravadas arredor de medio cento de coviñas. As medidas das cazoletas oscilan entre os catro e os oito centímetros de diámetro, e unha profundidade de entre 0,5 e dous centímetros».
Este hallazgo, al igual que el de las otras estaciones rupestres, ya fueron comunicadas tanto al Concello de Cervantes como a Patrimonio para su catalogación. Desde que en agosto Moure encontró el primero de los petroglifos, en A Campa do Barreiro, en Donís, fueron apareciendo el de Campo Redondo o el de Pico da Legua. Hay hipótesis sobre la finalidad de los petroglifos: lugares sagrados para rituales, fertilidad o mapas astronómicos.