Portomarín recuerda el pasado que sepultó el embalse de Belesar

Xosé María Palacios / Pradero LUGO

LUGO

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Decenas de vecinos asistieron a la presentación de un libro sobre la obra que trasladó el pueblo

29 jun 2013 . Actualizado a las 19:43 h.

«Co corazón». Así dijo hablar el alcalde de Portomarín, Juan Serrano, en la presentación de «Portomarín. Camiños de auga e soños», que recuerda la transformación derivada de una obra de envergadura como fue la del embalse de Belesar. La obra, de cuya ejecución se cumple medio siglo, sepultó gran parte de la localidad y obligó a trasladar algunos de los edificios más emblemáticos. El regidor recordó que el asunto depertaba «moito sentimento», y subrayó, con un tono de voz emocionado en algún momento, el ejemplo de los vecinos que dejaron sus casas y sus propiedades por un traslado forzoso.

El volumen «Portomarín. Camiños de auga e soños», editado por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, contiene imágenes y testimonios, que además, en el acto celebrado este mediodía en la Casa de la Cultura, quedaron también plasmados en un video que se proyectó. Al acto acudieron el conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Jesús Vázquez; el delegado del Gobierno, Samuel Juárez, y el presidente del citado órgano hidrográfico, Francisco Marín. Vázquez destacó el valor del pasado como activo generador de riqueza, mientras que Marín destacó también el ejemplo de vecinos que se vieron obligados a «escomenzar unha nova vida». Juárez recordó visitas infantiles a la localidad, enterrada bajo las aguas pocos años antes, pero también destacó la importancia de la energía hidroeléctrica.