Estudiantes de Arquitectura europeos proponen un plan para el edificio, que estuvo a punto de ser un centro social con el bipartito
03 mar 2013 . Actualizado a las 22:31 h.La historia del conocido como Pazo de Doña Urraca tendrá un nuevo capítulo a partir de este martes. Sesenta estudiantes de Arquitectura de las universidades de A Coruña, Clemont Ferrand y Regensburg visitarán Lugo con el fin de conocer la ciudad y de presentar un proyecto de prácticas que supone convertir el pazo en la Cinemateca de Galicia, un centro de archivo, conservación, estudio y divulgación del cine gallego. La propuesta, que forma parte del programa Iocobus, incluye sala de proyección para 350 personas, además de apartamento para profesores invitados. El arquitecto Felipe Peña, autor de la rehabilitación de los edificios del Vicerrectorado del Campus de Lugo, señala que el Pazo de Doña Urraca «es una pieza arquitectónica singular, en mal estado de conservación y perdida, en el interior de una manzana deteriorada a la que el paseo de la Muralla ha proporcionado una nueva visibilidad». En la propuesta de una cinemateca, explica cuál sería algunas de sus características: «Se facilitará la exhibición de películas al público -en sesiones de divulgación- y para estudiosos, con posibilidades de visionado en grupo y sesiones de debate». Además, afirman, «el conjunto debe de incluir un grupo de apartamento para profesores invitados, investigadores, estudiantes, etc. Con autonomía sobre el resto de la institución y con capacidad para integrarse en el tejido del barrio». Según las estimaciones que exponen, el 50% del programa se podría alojar en las zonas actualmente construidas: cada de Doña Urraca y edificios de la Rúa do Miño. La propuesta de esta cinemateca incluye una biblioteca, salas de trabajo, sala de exposiciones, zonas de talleres, despachos, además de los citados apartamentos y sala de proyecciones.
Un proyecto social que se vino abajo con la crisis
No es la primera vez que el Pazo de Doña Urraca estuvo en el centro del debate del patrimonio lucense. La Consellería de Vivenda en la época del bipartito, con Teresa Táboas al frente, presentó en el 2005 un proyecto para construir un centro social, viviendas y un centro de estudios sociales. Se haría no solo en el solar del pazo, sino en toda la unidad de actuación conocida como número 8 del plan de protección del casco histórico. Se convocó un concurso para que los arquitectos presentasen sus opciones y dos arquitectas de Vigo (Belinda Besada y María Esther Failde) lo ganaron. El proyecto también contemplaba la puesta en valor de los numerosos y valiosos restos arqueológicos que hay en la zona. Con el cambio de gobierno, la Xunta lo descartó, alegando que era muy cara su ejecución y que no cumplía en plan del casco viejo, con «un enorme impacto sobre a Muralla».
¿La propuesta de una cinemateca será una oportunidad para recuperar este singular edificio? Soñar es gratis, no solo porque se recupera el pazo, sino por la siempre anhelada sala de cine que demandaron durante décadas los colectivos culturales de la ciudad. La crisis, seguramente, será la excusa para no dar el paso de crear este sueño.