Vidal Pardo insistió en que en los efectos de los recortes en atención especializada «Galicia no es de lo peor, aunque estamos asustados porque cuando las barbas del vecino... y ya saben como acaba el refrán», dijo.
El presidente de los médicos lucenses se refirió también al cierre de camas y admitió que no existe demanda asistencial de mayor número de ellas. «No están quedando pacientes sin atender -puntualizó- por falta de camas».
En cuanto a los efectos que los recortes podrían tener sobre la puesta en marcha de los nuevos servicios previstos para el HULA, que sufren considerables retrasos, dijo que tenía el convencimiento de que hemodinámica estará operativo en este año. Sobre el resto de los servicios no se pronunció.
Ignacio Vidal se refirió también a las plazas de MIR. Según dijo, se presentaron 13.000 para 6.700 puestos. «Hoy por hoy -puntualizó- en el sistema público de toda Europa no puede trabajar ningún médico que no tenga plaza MIR».
Respecto de la formación en Lugo apuntó que si baja la calidad asistencial «y el tutor está sobrecargado, lógicamente la formación se deteriora». «Si Cataluña -añadió- se desvincula del sistema MIR sería terrible».