Los arqueólogos sortean la crisis con pequeñas obras e investigación

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Los cascos históricos aún ofrecen opciones laborales a estos especialistas

12 feb 2012 . Actualizado a las 07:03 h.

La construcción de los aparcamientos subterráneos de la capital lucense fue su presentación en sociedad. Desde entonces, la presencia de los arqueólogos trabajando en calles y solares lucenses fue habitual. El bum de la construcción y de las obras de infraestructuras públicas les abrió un amplio campo de trabajo. Con la crisis, estos buscadores del rastro de la historia atraviesan un momento laboralmente complejo. Hay menos trabajo de campo, las empresas con frecuencia encuentran dificultades para cobrar y hay profesionales que han tenido que abrirse a nuevos campos. Algunos de los arqueólogos que trabajan o han trabajado en Lugo cuentan sus propias experiencias en esta crisis.

Entre las excavaciones en las que participó Celso Rodríguez figuran las del solar del Vicerrectorado, frente a la catedral, en el que se localizaron vestigios de un templo dedicado a Mitra y de una gran casa romana, anterior a la construcción de la Muralla. Muy recientemente, excavó los restos del acueducto romano en la plaza de San Marcos. «Ahora estoy metido en proyectos de investigación» vinculados a la universidad, señala este especialista. Indica que fue centrándose en este campo a la vista de que la actividad de la construcción pública y privada caída en picado. Sigue investigando -señala- sobre el mitreo. De todos modos, él está pendiente de trabajos programados en la Muralla de Lugo y en la castillo de Pambre. Apunta que a finales del mes en curso probablemente verá la luz un trabajo sobre el templo dedicado a Mitra localizado en el solar del Vicerrectorado de Lugo.

La excavación en el citado solar deparó hallazgos tan relevantes que la Administración decidió musealizarlos in situ. La ejecución de este proyecto acumula un gran retraso.

Cuestión de enfoque

El monfortino Iván Álvarez, que en la capital realizó entre otros trabajos controles arqueológicos en la catedral lucense, señala que la situación en el sector «depende de cómo te orientes». En su caso, el año pasado realizó trabajos relacionados con la redacción de planes municipales de urbanismo. Los controles en obras de particulares en zonas de rehabilitación subvencionada como es el Camiño de Santiago se plantean como una opción laboral, indica. En su caso, dado que es autónomo, no se queja de cómo le va porque es «administrativo, peón y técnico» y no tiene que preocuparse de otros sueldos. Es algo en lo que coinciden otros profesionales que también son laboralmente autónomos y sortean la crisis sin grandes dificultades.