La cúpula del PP lucense ratificó la continuidad de Barreiro y de Ana Chao

Benigno Lázare LUGO

LUGO

ÓSCAR CELA

La actuación de Cacharro, que no asistió a la reunión, no figuraba en el orden del día El partido iniciará un proceso de análisis de resultados que puede conllevar cambiosLas únicas críticas a la dirección fueron las del alcalde de A Pobra de Brollón

06 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Los más de cien miembros de la ejecutiva provincial e invitados que asistieron a la reunión celebrada ayer por la noche en el Gran Hotel de Lugo, ratificaron por unanimidad la continuidad de José Manuel Barreiro como presidente del PP lucense, que puso el cargo a disposición del partido. También rechazaron la de la secretaria de organización, Ana Chao, que en privado sí fue cuestionada por algún alcalde. «A posta a disposición do meu cargo é algo que fixen desde sempre despois da celebración de eleccións», matizó el dirigente para restarle importancia a la iniciativa. Al menos oficiosamente, la junta transcurrió en una balsa de aceite, dadas las circunstancias, con la imprescindible autocrítica que comenzó realizando el presidente, como responsable máximo, y continuó por alguno de los alcaldes que obtuvieron los peores resultados, entre ellos Enrique Fernández, de A Pontenova. De inmediato iniciarán el análisis municipio a municipio e incluso mesa a mesa, que en algunos casos tendrá como consecuencia cambios, según anunció el presidente. También oficiosamente, la reunión de ayer de la ejecutiva fue la de la liquidación del cacharrismo, pero por omisión. No hablaron de expedientes y menos aún de expulsiones porque, simplemente, ni figuraba en el orden del día. En privado era difícil encontrar entre los concurrentes algún partidario del presidente de la Diputación en funciones. En todo caso, la única voz ligeramente crítica con la dirección actual pudo haber sido la del alcalde de Pobra de Brollón. Según trascendió, el propio Barreiro encarriló las intervenciones que hubo en el turno de ruegos y preguntas, afirmando que no se pueden buscar chivos expiatorios y que las causas de los resultados son múltiples. Sin citar expresamente al presidente de la Diputación, dijo que la militancia en el partido es voluntaria y que la actual dirección no pidió a ningún alcalde que renunciase a repetir. Como era previsible, Francisco Cacharro no asistió, pero tampoco lo hicieron los otros dos senadores, Fernando Carlos Rodríguez y César Aja porque, al parecer, estaban en Madrid.