El periodista arteixán Miguel Sande gana el García Barros de novela

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

A CORUÑA

Roberto Amado

19 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Una familia normal, de clase media, que quiebra por la crisis; una madre que lo graba todo en vídeo porque solo así es capaz de creer lo que les está sucediendo. Que roba productos básicos en los supermercados y a cambio deja un libro de lectura obligada de su hija en el instituto, Rosalía, pongamos Castelao, como moneda de pago. Una hija que para dar el paso del instituto a la universidad precisa de una beca de estudios; que participa de movimientos sociales, políticos, para tratar de construir lo que ella considera un mundo más igualitario y más justo. Una sisi que ha de alternar estudios, beca y trabajo para sobrevivir. Un padre que aparece al final para hacer pedazos el rompecabezas. Una manera de contarlo: «hiriente, impactante, abrupta, incorrecta». Son los calificativos que recoge el acta de los miembros del jurado que dieron el Premio García Barros de novela, en su 28.ª edición, a A candidata, de Miguel Sande, que ahora aparece publicada en la editorial Galaxia.

El periodista arteixán, delegado de La Voz en Viveiro, retrata la lucha de una familia media que de pronto sin saber exactamente por qué, dejó de ser normal y se convierten en morosos, apestados, quedando al margen. Desaparece. Como tantas, como miles y miles de familias. Los ideales de la hija, esa entrega tan especial y ciega a la política y al sexo, por igual; ese compromiso y ese modo de narrarlo que lleva a la cima y al abismo, que nos sacude en una experiencia de lectura de gran intensidad en apenas 136 páginas.

Lo que se refleja en esta novela les sucede a muchas familias en este tiempo; muchos jóvenes -en el instituto, en la universidad- están viviendo una situación familiar y personal semejante, pendientes de sus becas de estudio, conscientes de las dificultades incluso para hacer las tres comidas del día. Sande lo reinterpreta, sublima los detalles y las sensaciones como narrador y poeta para incomodarnos y a la vez gozar. Perturbarnos desde el principio hasta el final. Y aún quedará el desenlace del padre al final para hacernos tomar parte, para que juzguemos de quién es la culpa, como si nos llegara una citación para ser parte, como lectores, de un jurado popular. 

El Premio García Barros de novela es uno de los más antiguos en Galicia. Está dotado con 9.000 euros.