Nada mejor para saludar la llegada de un nuevo sello mexicano que apuesta por editar en España -siguiendo el ejemplo de éxito cabal que es hoy Sexto Piso- que tener en la manos un libro como Malayerba. La vida bajo el narco, que reúne las crónicas que el premiado periodista Javier Valdez Cárdenas (Culiacán, 1967) escribió alrededor de la violencia del narcotráfico en el norte de México. La jubilosa bienvenida a Jus, Libreros y Editores está más que justificada en este tomito que recoge las piezas publicadas originalmente en el semanario Ríodoce (que el propio Valdez Cárdenas fundó con un grupo de colegas sinaloenses) en la selección realizada por Antonio Ramos. El antólogo define estas crónicas como una premonición de lo que puede su país llegar a ser como sociedad si consiente la hegemonía de los carteles de la droga: «Es el México del futuro el que aparece en estas páginas, pero también, el México que ya existe en muchas de las ciudades importantes del norte del país, ese norte que no tiene una línea precisa pero que lo mismo abarca a Culiacán que a Tijuana, a Monterrey y Tampico. El norte descrito en estas páginas es uno afiebrado por los revolucionarios de estos tiempos: los ejércitos sin freno de sicarios de los capos que al son de los cuernos de chivo y el chirrido de las llantas de sus hummers y lobos marcan el paso de las ciudades y sus noches, del aparente silencio de sus rancherías y caminos vecinales». Lo que encontrará el lector en este delicioso pero acre volumen es una serie de breves estampas sobre una realidad brutalmente retorcida, alterada, como también un prodigio en el reflejo verbal de un submundo que, a fuer de inundarlo todo, acaba empapando la lengua coloquial, el habla de la calle. Valdez no se empeña justiciero en señalar a buenos y malos, solo retrata la vida cotidiana de las víctimas y los victimarios. Como la vida real. Sin edulcoración.