Entre mámoas, iglesias y molinos por tierras de A Broza

carlos rueda, francisco albo MONFORTE / LA VOZ

O SAVIÑAO

Un recorrido de 10,6 kilómetros por el patrimonio de una parroquia de O Saviñao

16 jun 2017 . Actualizado a las 18:57 h.

El patrimonio de la parroquia de Santo Tomé da Broza, en O Saviñao, consiste principalmente en arquitectura religiosa. Pero la zona cuenta también con un notable conjunto de mámoas o túmulos megalíticos y una interesante arquitectura tradicional. Un recorrido en automóvil de 10,6 kilómetros permite conocer los principales elementos de este legado.

La ruta empieza en la capilla de San Antonio, a unos nueve kilómetros de la capital del municipio. El edificio, sin especial valor arquitectónico, fue restaurado en tiempos recientes. Junto a él hubo una mámoa de la que no quedan restos. Unos seiscientos metros más adelante se encuentra el campo de mámoas de Bandeira, donde se pueden apreciar a simple vista algunos de estos túmulos funerarios. Todos ellos se encuentran alterados debido a las labores agrícolas.

Seguimos en dirección a Rebordondiego, una localidad situada a dos kilómetros. A la entrada está la capilla de Nosa Señora de Rebordondiego, muy alterada por modernas reformas y añadidos. En esta aldea destaca el molino de A Carballada, con un edificio de gran tamaño y dos salidas de agua. En sus inmediaciones pueden verse los restos de un canal que surtía de agua al molino, de gran altura y longitud, levantando sobre columnas. Otro elemento singular es una fuente encastrada en un muro de piedra y de forma cuadrada.

Capilla de Xixiriz

A tres kilómetros de Rebordondiego está el lugar de Xixiriz, donde se halla la capilla de San Gregorio. En su interior hay un retablo del siglo XVIII e imágenes de San Gregorio Magno y la Virgen del Rosario. Para continuar el recorrido hay que regresar al cruce anterior y seguir en dirección a A Broza por un vial que arranca a la izquierda. La iglesia parroquial de Santo Tomé da Broza se encuentra a un kilómetro del cruce. El edificio es del siglo XVII, pero después sufrió diversas reformas. El retablo mayor es de tipo salomónico y está datado en el siglo XVIII. Frente al templo hay un cruceiro en piedra policromada que se eleva sobre un pedestal formado por piedras circulares. El fuste es de sección cuadrangular con diversos decorados y rematado en un capitel con Jesús crucificado y la Dolorosa en la parte opuesta. Al lado de este conjunto está la antigua casa rectoral, con muros de piedra y encalados.

Seguimos hasta entrar en la localidad de A Broza, donde destaca la arquitectura popular de algunas de sus viviendas. Entre ellas se encuentra la Casa da Torre, que está cayendo en la ruina. Medio kilómetro más adelante, en el lugar de A Ribeira, hay un cruce de carreteras. Nos desviamos a la derecha por un vial que lleva a Estrumil y Forcados. Al cabo de tres kilómetros de recorrido se llega a un cruce, donde hay que tomar el vial de la izquierda en dirección a Ourigo y Albariza. Unos setecientos metros más adelante cruzamos el río Sardiñeira. A la izquierda queda el molino de A Armada, que se halla en estado de abandono pero conserva los vestigios de su antigua maquinaria.

Pozo en roca viva

Continuamos avanzando por el asfalto unos setecientos metros más hasta llegar a una bifurcación. Si tomamos el ramal de la izquierda accedemos al lugar de Albariza -situado a unos cuatrocientos metros-, donde se encuentra un llamativo pozo labrado en la roca, al lado de una antigua vivienda, con una profundidad de unos diez metros. Regresamos al cruce y torcemos a la derecha en dirección a Ourigo, que se encuentra a 2,3 kilómetros de distancia. Lo más destacable en esta localidad es la Casa de Federico, formada por varias construcciones adosadas y una capilla, en mal estado de conservación. En la fachada posterior de la vivienda, sobre un portón, hay dos curiosos escudos de piedra con diversos motivos. Seguimos el recorrido pasando por el lugar de Agroxoi y finalizamos - 2,2 kilómetros más adelante- en el punto de inicio.

Desde escairón

Hay que salir de Escairón por la carretera que lleva A Retorta y Rebordondiego. El punto de inicio está en el kilómetro 8,6, en un cruce de carreteras.

Es preciso seguir de frente durante medio kilómetro hasta llegar al lugar donde se asienta la capilla de San Antonio, a la izquierda de la carretera