La víctima del asalto tuvo que ser hospitalizada como consecuencia de los puñetazos que le propinaron
24 jul 2017 . Actualizado a las 21:43 h.Cuatro vecinos de Monforte y Lugo, de entre 25 y 51 años de edad, fueron detenidos por la Guardia Civil como presuntos autores de un robo con violencia cometido en Sober durante la noche del 6 al 7 de marzo. La víctima del robo fue un anciano de 81 años de edad que fue agredido con el objetivo de robarle el dinero en efectivo que guardaba en su domicilio y que tuvo que ser ingresado en el hospital comarcal como conecuencia de los golpes.
Ante la gravedad de estos hechos, la Guardia Civil, según fuentes del propio cuerpo, «abrió una investigación prioritaria en la que no se escatimaron medios ni tiempo» con el fin de identificar a los autores y de dar con su paradero.
La investigación fue dirigida por el juzgado de instrucción número 1 de Monforte y realizada por la Guardia Civil de la Comandancia de Lugo, con la colaboración del miembros del servicio de criminalística de Madrid. La colaboración ciudadana, apuntan desde el instituto armado, «fue fundamental para el éxito de la operación, pues varios testigos alertaron a los investigadores sobre un vehículo desconocido que vieron por el lugar días antes de los hechos».
Una vez recabados todos los indicios posibles, tras cuatro meses de gestiones y análisis, la detención de los implicados se llevó a cabo en en un operativo que se desarrolló en Lugo y Monforte a lo largo de los pasados lunes y martes.
Puerta rota a golpes y múltiples agresiones físicas
El suceso que provocó las detenciones realizadas esta semana se produjo en la localidad de Fontemaior, perteneciente a la parroquia de Lobios. Los ladrones entraron en la vivienda de la víctima -que estaba durmiendo en su habitación- rompiendo a golpes la puerta, pese a lo cual ningún vecino sintió nada. Una vez dentro, lo buscaron y le exigieron que dijese dónde tenía guardado el dinero. En la casa no había en ese momento ninguna cantidad importante de dinero ni objetos de valor. Al no conseguir que el dueño de la casa les entregase lo que pedían, lo maltraron hasta que se persuadieron de que no podrían obtener nada.
Según las fuentes consultadas en su momento, los asaltantes dieron puñetazos al ocupante de la vivienda en diferentes partes del cuerpo y uno de ellos incluso se subió encima de él y le apretó el cuello amenazando con estrangularlo. En el examen médico se notificaron diversas contusiones, la más aparatosa de las cuales fue un hematoma en un ojo causado por los puñetazos.