La Xunta reparte 211.000 euros entre 93 cosecheros afectados por el granizo

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Las ayudas por los daños en Doade oscilan entre los 207 y los 15.000 euros

18 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cerca de un centenar de viticultores recibirán finalmente compensaciones económicas por los daños que causó en las viñas de Doade la granizada previa a la última vendimia. La Xunta de Galicia repartirá algo más de 211.000 euros en ayudas entre los cosecheros que perdieron parte o la totalidad de la producción. Según estimaciones del consejo regulador de Ribeira Sacra, el pedrisco se llevó por delante 400.000 kilos de uva.

Los destrozos por la granizada dieron paso a un verdadero baile de cifras sobre el número de afectados y la inversión que se destinaría a paliarlo. En un primer momento se habló de 115 viticultores afectados. La propia administración autonómica amplió poco después a 289 el número de damnificados. Finalmente, la resolución publicada ayer en el Diario Oficial de Galicia por la Consellería de Medio Rural incluye 93 beneficiarios.

La cuantía de las inversiones de la Xunta también experimentó diversos avatares. De entrada iba a ascender a 600.000 euros, de los que 500.000 se destinarían a ayudas a los viticultores y los 100.000 restantes a la reparación de las pistas. Estas últimas obras fueron realizadas poco después por la empresa Tragsa por un presupuesto de alrededor de 80.000 euros. A las subvenciones se destinan finalmente 211,593 euros, lo que supone una media de 2.275 euros por solicitud.

En la lista de beneficiarios figuran pequeños viticultores y también bodegas como Regina Viarum, Algueira o Guímaro que tienen una importante superficie de viñedo en la ribera de Doade. La ayuda de menor cuantía es de 207 euros y está asignada a nombre de Emilia Díaz Díaz. El mayo importe de las subvenciones es de 15.000 euros, cantidad que corresponde a la bodega Regina Viarum y a Gumersindo Díaz González, viticultor profesional que posee una de las mayores viñas de la zona.

Solo fue preciso gastar la mitad de la inversión que estaba prevista

La particularidad de la viticultura que se practica en la Ribeira Sacra fue uno de los aspectos que se valoraron para activar la línea de ayudas por los daños del granizo en Doade. La orden de la consellería aludía a la pertenencia de la denominación de origen a la asociación europea de zonas de viñedo de montaña y también al papel que desempeñan los cosecheros en la conservación del medio rural en el sur lucense. Inicialmente se destinó a esta partida un presupuestos de 500.000 euros, de los que se gastarán algo menos de la mitad.

Los daños por la granizada fueron dispares, en función del emplazamiento de las viñas. Algunas quedaron completamente arrasadas y en otras se pudo salvar hasta la mitad de la cosecha. Adega Guímaro, por ejemplo, no sacará sus vinos de finca en la cosecha del 2013 debido a los destrozos del pedrisco en las viñas de Pombeiras, Meixemán y Capeliños. Pese a todo, los tratamientos cicatrizantes que se aplicaron tras la tormenta parecen haber surtido efecto. En las tareas de poda que se llevan a cabo estos meses, los viticultores pudieron comprobar que la madera de las vides está en mejores condiciones de lo que se podía esperar.