Las quejas por las talas de Fenosa llegan a Medio Rural

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

roi fernández

A uno de los propietarios le cortaron un roble a trece metros del tendido eléctrico

06 dic 2016 . Actualizado a las 20:32 h.

La denuncia presentada ante la Guardia Civil por el propietario del castaño de grandes dimensiones talado cerca de Castro no es la única queja formal que provocaron los polémicos desbroces de tendidos eléctricos realizados este año en Carballedo. Al menos otro propietario presentó también una reclamación por escrito, en su caso porque le cortaron un roble centenario que estaba a trece metros de distancia de la línea.

El árbol se encontraba en el lugar de Filgueira, en la parroquia de Buciños. Como le pasó a la mayoría de los afectados por estos desbroces, el dueño del roble no estaba allí cuando pasó el personal de la empresa forestal contratada por Unión Fenosa Distribución para llevar a cabo la limpieza del terreno por el que pasan sus tendidos eléctricos. Se dio cuenta cuando visitó la finca este verano y vio el tronco en el suelo.

Después de hacer una consulta en el cuartel de la Guardia Civil de Carballedo y en el Seprona, decidió presentar una reclamación en la Consellería de Medio Rural. Ahora está pensando en hacer lo mismo en la Consellería de Industria, el departamento competente en materia de líneas eléctricas.

En este caso, llama la atención la distancia a la que se encontraba el tendido eléctrico del árbol que fue talado. Si los testigos aseguran que el castaño de Castro estaba a nueve metros de distancia de los cables, el roble de Buciños estaba a trece. La distancia de seguridad que marca la ley es de cinco metros. Las talas fuera de esa franja están permitidas solo si la altura del árbol hace que su hipotética caída hacia el tendido pudiese alcanzar los cables. En este último caso, la empresa que hace la limpieza está obligada a avisar a la Consellería de Medio Rural antes de proceder a la tala.