La reja que cerrará la entrada de la Cova das Choias ya está diseñada

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CARLOS RUEDA

Para financiar el proyecto se solicitaron ayudas a la Consellería de Medio Ambiente

15 sep 2016 . Actualizado a las 21:54 h.

El Ayuntamiento de A Pobra do Brollón y la comunidad de montes de la localidad de Biduedo ya disponen de un proyecto concreto para cerrar la Cova das Choias a fin de conservar una importante población de murciélagos de especies amenazadas y una colonia de musgos de una variedad en peligro de extinción. Para financiar esta actuación se han solicitado ayudas de la Consellería de Medio Ambiente aprovechando la última convocatoria de solicitud de subvenciones del programa de desarrollo rural.

El proyecto fue elaborado por especialistas de la asociación Drosera -dedicada al estudio y la conservación de las poblaciones gallegas de murciélagos-, que propuso tomar esta medida. Después de barajar diversas posibilidades se decidió colocar una verja en la entrada de la cueva, en un punto que se ha elegido con cuidado a fin de que la estructura pueda instalarse de la manera más fácil posible. Además de la complejidad del relieve de la boca de la cavidad, fue preciso tener en cuenta el hecho de que el trabajo deberá realizarse de forma manual. El sendero estrecho y empinado que lleva hasta la entrada de la gruta no permite de ninguna manera el paso de maquinaria.

La verja, además, deberá ser construida de tal manera que permita entrar y salir sin problemas a los murciélagos que viven en la cueva. Según explica Roberto Hermida, biólogo de la asociación Drosera, el diseño de esta estructura se trazó teniendo en cuenta las dos especies de quirópteros que usan la cavidad como refugio: el murciélago de cueva (Miniopterus schreibersii) y el murciélago grande de herradura (Rhinolophus ferrumequinum).

Diferentes modelos

Según explica Hermida, «os modelos de reixa que se utilicen para pechar unha cova teñen que adaptarse aos morcegos que viven no lugar, porque os seus tamaños e ás súas características poden ser moi diferentes segundo as especies», explica Hermida. Por otra parte, la verja contará con una puerta que estará normalmente cerrada pero que permitirá que los investigadores accedan al interior para realizar observaciones y evaluar con regularidad el estado de conservación de las colonias de murciélagos. La puerta servirá también para que pasen los visitantes en el caso de que se decida organizar visitas controladas, algo que todavía está por decidir. En caso de que así sea, los especialistas que colaboran en el proyecto establecerán unas directrices para regular el número de personas que podrán entrar de cada vez, además del tiempo de duración de las visitas.

Tampoco se ha determinado por ahora si se cobrará entrada en el caso de que se decida abrir la cueva a visitas turísticas. Eso es algo que decidirá en su momento la comunidad de montes de Biduedo, en cuyos terrenos se encuentra la cueva. «En todo caso, se se decide cobrar entradas, o prezo terá un carácter simbólico», apunta el alcalde José Luis Maceda.

Un lugar de gran importancia que quedó fuera de la Red Natura por un centenar de metros

Por ahora no se ha fijado una fecha para instalar la reja que cerrará la cueva, lo que depende de si se conceden las ayudas económicas solicitadas a la Xunta. Los promotores del proyecto esperan que eso pueda resolverse este otoño. Las subvenciones, por otro lado, fueron pedidas dentro de una línea específica para zonas situadas dentro de la Red Natura. Se da la circunstancia de que la Cova das Choias queda fuera el territorio del lugar de interés comunitario Ancares-Courel, cuyo límite se encuentra aproximadamente a un centenar de metros.

Roberto Hermida considera «sorprendente» que la cueva no se incluyese en esta zona de protección, pero puntualiza que esto también ha sucedido con otros lugares de interés zoológico de Galicia. «Isto débese a que a delimitación das áreas incluídas en Rede Natura fíxose tendo en contra sobre todo os criterios botánicos, é dicir, que prestou moita atención á vexetación pero non tanto á fauna -señala- e iso é un erro que se debería corrixir no futuro».

De todas las formas, las mencionadas ayudas también se pueden solicitar para lugares situados en el entorno inmediato de las zonas pertenecientes a Red Natura, como es el caso de la cueva de Biduedo. «Como a distancia é moi curta, está claro que cada vez os morcegos que viven na Cova da Choias saen a buscar alimento entran na área protexida e móvense por ese territorio, polo que tamén forman parte do seu patrimonio natural», apostilla el biólogo.