Nuevas iniciativas amplían en la zona el número de yacimientos acondicionados para recibir visitas
14 jul 2016 . Actualizado a las 12:49 h.Tres actuaciones que están previstas para este verano ayudarán a fomentar el aprovechamiento turístico de los yacimientos arqueológicos del sur lucense. Una de ellos es el desbroce de la maleza que invade el castro de Sobredo -en el municipio de Folgoso do Courel-, una tarea que será realizada por un campamento juvenil de trabajo que empieza hoy su actividad. La otra iniciativa consiste en un proyecto arqueológico que se pretende llevar a cabo en el castro de San Lourenzo -en la parroquia de Cereixa, en A Pobra do Brollón- y que comprenderá las primeras excavaciones que se realicen en este asentamiento, así como su acondicionamiento para las visitas turísticas. Los trabajos empezarán a comienzos del mes próximo.
Por otro lado, la Fundación Xosé Soto de Fión espera dar continuidad en breve plazo a las excavaciones que inició en el 2013 en el castro de Arxeriz, situado en los terrenos pertenecientes al museo del mismo nombre, en el municipio de O Saviñao. Los restos de antiguas construcciones que fueron puestos a la luz en las tres campañas arqueológicas realizadas hasta ahora en el castro fueron consolidados y señalizados con el fin de mostrarlos a los visitantes y lo mismo se espera seguir haciendo en lo sucesivo.
A estas iniciativas se suma el desbroce y la señalización de un importante conjunto de túmulos megalíticos situado entre las parroquias de Piñeiró y Abuíme, en O Saviñao. Esta operación fue llevada a cabo recientemente dentro del proyecto Á Luz das Mámoas, que cuenta con el apoyo por la Dirección Xeral de Xuventude e Voluntariado.
Apertura de rutas
Los trabajos que se llevarán a cabo esta temporada se añaden a la apertura, en los últimos años, de diversas rutas de senderismo que pasan por yacimientos arqueológicos de diferentes épocas, si bien casi ninguno de ellos ha sido objeto de excavaciones o investigaciones.
Monumentos que se pueden visitar actualmente
Los principales yacimientos arqueológicos del sur lucense que han sido incluidos en rutas turísticas son los siguientes.
Petroglifos. Las rutas del románico del consorcio turístico de la Ribeira Sacra incluyen este año por primera vez un conjunto de petroglifos. Se encuentra en el monte de Fabeiro, en el municipio de Carballedo. Por otro lado, el municipio de Sober señala en su web la existencia de petroglifos en las parroquias de Figueiróa y Proendos, pero estos puntos no están señalizados sobre el terreno, lo mismo que sucede con otros grupos de grabados descubiertos en los últimos años en diferentes lugares del territorio municipal.
Túmulos megalíticos. Los únicos yacimientos de este tipo que fueron señalizados hasta ahora en el sur lucense son la necrópolis del monte de Santa Mariña -entre los municipios de O Incio y Samos- y el conjunto de mámoas de Piñeiró y Abuíme, en o Saviñao. Los carteles instalados en el segundo de estos espacios fueron dotados además con códigos QR que permiten a los visitantes obtener información sobre el yacimiento en el mismo lugar.
Castros. Solo el castro de Sobredo y el de Arxeriz han sido excavados y preparados para recibir visitas. El primero de ellos está comprendido en una ruta de senderismo que el Ayuntamiento de Folgoso do Courel describe en su página oficial de Internet y que pasa también por la cascada de Rexiu. Por otro lado, una de las rutas de senderismo más populares de la Ribeira Sacra -la de la cascada de Augacaída, en Pantón- termina en el castro de Marce, en un espectacular paraje a orillas del Sil, donde aún no se ha llevado a cabo ninguna excavación.
Minas romanas. El túnel de Montefurado es tradicionalmente el rastro más visible y conocido de las explotaciones auríferas de la época romana, pero la comarca de Quiroga cuenta con otros parajes de este tipo que se encuadran en diversas rutas turísticas. Entre los itinerarios de senderismo señalizados en el municipio quirogués hay dos -denominados Ruta do Ouro e do Camiño Real y Ruta do Ouro e do Aceite- que pasan por antiguas explotaciones mineras. El municipio de Ribas do Sil también cuenta con una Ruta do Ouro. En el de Folgoso do Courel se encuentran las minas de Torubio, Millares, A Toca y el monte Barreiro, así como el túnel de Romeor, que en realidad es un acueducto minero.
Un patrimonio que permaneció olvidado durante muchos años
Durante mucho tiempo, en el sur lucense no hubo ningún yacimiento arqueológico señalizado y acondicionado para recibir visitas turísticas. El único lugar relativamente accesible que solía figurar en las guías era el dolmen de Abuíme, en el municipio de O Saviñao, pero -además de encontrarse en un terreno privado- carecía de señales y a menudo quedaba oculto por la maleza, por lo que resultaba difícil localizarlo. La Asociación Veciñal do Saviñao, de acuerdo con los propietarios de los terrenos, desbrozó un sendero de acceso en tiempos recientes. Sin embargo, la zona ha vuelto a quedar cubierta por la vegetación, por lo que el mencionado colectivo pidió hace días al Ayuntamiento que se ocupe esta vez de la limpieza.
Otra excepción es el castro de Sobredo, en el municipio de Folgoso do Courel, donde se llevaron a cabo varias excavaciones entre 1993 y 1996. Los vestigios de edificaciones que se desenterraron en el curso de estos trabajos se consolidaron con el fin de que el yacimiento pudiese recibir visitantes. Al mismo tiempo se limpió la maleza en el castro de Vilar, situado en el mismo municipio. Desde entonces, sin embargo, la vegetación silvestre volvió a invadir ambos yacimientos en numerosas ocasiones, lo que hacía que el acceso resultase difícil o impracticable.