El Ayuntamiento está dispuesto a licitar las obras antes de contar con el permiso de la confederación
29 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Una de cal y otra de arena en la reunión de ayer en Ourense entre el alcalde de Monforte y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. Lo mejor del encuentro fue la disposición de este organismo estatal a participar en un convenio que financiaría actuaciones del plan de reducción de vertidos. El lado menos positivo tiene que ver con el culebrón del saneamiento del puerto seco. Todavía está sin autorizar la canalización que debe dar salida a las aguas de la depuradora que pagarán el Ayuntamiento y la Consellería de Infraestruturas.
Ambas partes avanzaron el pasado mes de febrero un principio de acuerdo para costear la instalación de una pequeña depuradora que permitiría el inicio de la actividad empresarial en el puerto seco. La conselleira sugirió entonces que no habría problemas con la confederación hidrográfica, que no permite conectar la plataforma logística al alcantarillado mientras no se resuelvan los problemas en la red de saneamiento. El convenio se firmó el pasado cinco de mayo, pero el permiso para los vertidos de la depuradora del puerto seco sigue sin llegar.
El alcalde resta trascendencia a esta demora y anuncia que el concurso para adjudicar el proyecto podría ser convocado incluso antes de que llegue la licencia. «Hai unha fórmula legal que permite facer unha licitación supeditada á concesión do permiso», explica. Si se produjese algún tipo de contratiempo, de este modo el Ayuntamiento no tendrá que indemnizar a la adjudicataria. El retraso en la concesión del permiso estaría justificado, a juicio de Tomé, «polos tres requirimentos de documentación complementaria que tivo que atender Xestur».
Xestur fue la entidad promotora de la urbanización del puerro seco, pero tras la firma del convenio con la consellería su titularidad pasa a ser municipal. Será el Ayuntamiento, por ello, el que saque a concurso las obras que ahora están pendientes del permiso de vertido. El proyecto de la depuradora tiene un coste de 290.000 euros, que se repartirán las administraciones local y autonómica.
Reducción de vertidos
El alcalde prefiere no hablar de cifras, al menos de momento, al referirse al convenio que quiere dejar listo este año para financiar obras del plan de reducción de vertidos. Tomé tiene el apoyo explícito del presidente de la Diputación y ayer puedo constatar, a través de su titular, la disposición de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil para colaborar en la financiación de los trabajos. A partir de ahora, comenzará el intercambio de borradores del posible convenio. «Se pode estar listo en outubro, mellor que en novembro», dice Tomé.
Sería un plan de obras a tres años vista que permitiría, desde su punto de vista, suprimir buena parte de los problemas de vertidos que ahora impiden conectar el saneamiento del puerto seco con la red municipal. Descartada la construcción de una nueva depuradora, por su elevado coste, las actuaciones estarán encaminadas a evitar que la filtración de aguas pluviales sature la actual planta de tratamiento.