Un premio aéreo para los turistas más aplicados

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

La Ribeira Sacra sortea 74 pases para volar en globo sobre el Sil y el Miño, pero es preciso haber pisado bien el terreno para participar

04 jun 2016 . Actualizado a las 17:37 h.

Un total de 74 turistas afortunados sobrevolarán en globo el cañón del Sil y las gargantas del Miño después de este verano. No se sabe de ningún otro vuelo en globo sobre estos parajes, así que probablemente ellos serán los primeros en tener este privilegio. Se trata de una campaña promocional puesta en marcha por el consorcio de turismo de la Ribeira Sacra, pero no podrán participar todos los turistas porque habrá un sorteo en el que solo podrán participar los que demuestren haberse trabajado bien esta zona del interior de Galicia, rica en patrimonio histórico, paisajes espectaculares y vinos cultivados en laderas imposibles. A modo de anticipo, dos globos sobrevolaron ayer Monforte.

El consorcio de turismo sorteará al final del verano 36 «pasaportes ás nubes da Ribeira Sacra», cada uno de ellos para dos personas. Entrarán en el sorteo quienes acreditan haber llevado a cabo al menos ocho actividades distintas dentro del área geográfica de la Ribeira Sacra, como pasar una noche en algún establecimiento hotelero, comer en algún restaurante, hacer dos rutas en barco o visitar alguna de las decenas de iglesias o monasterios románicos que jalonan las riberas del Miño y el Sil en esta zona en la que confluyen los dos mayores ríos de Galicia. Las oficinas de turismo de la Ribeira Sacra empezarán a repartir estos pasaportes el 20 de mayo y seguirán haciéndolo hasta el 30 de septiembre. En manos de quienes los retiren estará aprovechar esos cien días para llenarlos y ganar el derecho a entrar en el sorteo. Los viajes en globo serán entre octubre y noviembre.

«Aún no hay fechas exactas para las salidas -explica Alexandra Seara, la gerente del consorcio de turismo-, porque eso va a depender de las condiciones meteorológicas». Lo que ya se sabe es que los globos tendrán dos puntos de partida distintos, uno en algún paraje próximo al cañón del Sil y otro en las gargantas del Miño.

El punto de aterrizaje lo decidirá el viento, como ocurrió con el vuelo de presentación de esta campaña que se celebró ayer en Monforte. Dos globos despegaron poco antes de las nueve de la mañana del Campo da Compañía. En uno iban doce representantes de ayuntamientos, bodegas de la denominación de origen Ribeira Sacra y establecimientos hoteleros, que habían sido elegidos por sorteo. Y en el otro, seis fotógrafos y cámaras de televisión que iban a dejar constancia gráfica del paseo.

Las predicciones anunciaban buen tiempo, pero había que contar con la clásica niebla monfortina. Los pilotos retrasaron la salida para dejar que levantase un poco, pero al final la niebla incluso ayudó a hacer la experiencia más espectacular. «La vista de la niebla cubriendo Monforte con las montañas de O Courel a un lado y al otro el cañón del Sil bien a la vista era algo tremendo», contaba uno de los fotógrafos al aterrizar una hora después a un par de kilómetros al norte del casco urbano.

En el consorcio confían en que la empresa de Segovia que pone los globos aproveche la experiencia de este año y que en el 2017 los vuelos por la Ribeira Sacra se conviertan en regulares.

Si la experiencia tiene éxito, podría haber vuelos regulares en el 2017