Espacios y precios se fijan «por costumbre» ante el vacío legal en la venta ambulante
13 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.No solo el mercadillo de los domingos en el Parque dos Condes necesita una regulación. Tampoco existe una ordenanza como tal que regule la venta ambulante en el recinto ferial de As Lamas. La instalación de los puestos y las correspondientes tarifas se aplican «por dereito consuetudinario», señalan fuentes municipales. Normas jurídicas que no figuran escritas, pero que se cumplen porque con el tiempo se han hecho costumbre. Esta ausencia de reglamentación trasciende cuando el Ayuntamiento tiene sobre la mesa una solicitud de la Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos que le reclama información sobre los puestos que se instalan «nas feiras e mercadiños».
La obligatoriedad de aprobar ordenanzas municipales ya figuraba recogida en el decreto sobre venta ambulante que entró en vigor el año 1985. En Monforte parece que sus directrices nunca se llevaron a la práctica. El anterior equipo de gobierno pretendía redactar una «nueva ordenanza» aprovechando el frustrado traslado de la feria a la Compañía, con el que se especulaba en el año 2007. Las tasas que pagaban los puestos estaban desfasadas y el cambio de ubicación iba a facilitar su puesta al día. Pero aquel ambicioso proyecto quedaría en una simple ocurrencia.
El rechazo del comercio obligó a dar marcha atrás y los precios que se aplican por «derecho consuetudinario» siguen igual que entonces. Fuentes municipales indicaron que las tarifas por instalarse en la feria son «simbólicos» y no superan los dos euros por jornada.
En la recta final del anterior mandato, el gobierno municipal cambió su estrategia para normalizar la situación de la feria. La revisión de la ordenanza se haría de forma conjunta con la regularización del mercadillo del Parque dos Condes, con el pretexto de las reformas proyectadas en el recinto de As Lamas. Tampoco entonces se cumplieron los planes municipales y en la actualidad la única normativa que está en fase de elaboración es la del mercadillo.
Preguntado sobre la posibilidad de redactar una normativa conjunta, el alcalde señala que habría que valorar «se son cousas semellantes ou se pola contra o que procede é redactar as ordenanzas por separado». Tomé afirma, por otro lado, que no ha tenido acceso al escrito remitido por la Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos. El texto fue enviado al Ayuntamiento el pasado 10 de septiembre a través del registro general de la Xunta en Pontevedra, donde tiene su sede este colectivo.
La asociación quiere saber, concretamente, cuántos puestos se instalan en las ferias y mercados de Monforte y en qué medida disponen de la pertinente licencia municipal. «A metade dos ambulantes son intrusos que se aproveitan dos que estamos legais. Sufrímolo nós e o comercio local, que somos aos que tiñan que protexer os concellos», dice su presidente, Jesús Francisco Romero. Este colectivo amenaza con emprender acciones legales contra los ayuntamientos que consientan la venta ambulante sin autorización.
Piden que la Policía Local informe sobre las autorizaciones de los puestos
Monforte no es el único ayuntamiento al que se ha dirigido Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos. El escrito se ha remitido a 52, de los que solo diez contestaron. La información facilitada desde Salceda de Caselas lleva las firmas del alcalde, el secretario y dos policías locales. En una inspección en la feria de esa localidad, comprobaron que de más se sesenta puestos solo doce tenían la tarjeta de autorización a la vista. «É unha imaxe da situación na que estamos e da miseria á que nos levan», sostiene Jesús Francisco Romero.
Monforte no ha contestado a su solicitud. «Non queremos contestacións de políticos, senón informes da policía local con datos cos que poder defender os nosos dereitos e intereses», señala el presidente de la asociación. La petición dirigida al Ayuntamiento se produce coincidiendo con el debate sobre las exigencias que deberá recoger la nueva ordenanza para los puestos que se instalen en el mercadillo del Parque dos Condes.
El Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos entiende que este tipo de venta solo debe autorizarse en el caso de aquellos puestos que acrediten «estar dados de alta na seguridade social e no imposto de actividades e ter subscrito un seguro de responsabilidade civil».