Renfe sustituye un tren de 260 plazas por el turístico, que tiene sesenta

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

El convoy salió de Vigo ya casi lleno, en Ourense se abarrotó y siguió hasta Monforte con los pasajeros sentados en el pasillo

10 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Renfe está recurriendo al tren turístico para solucionar sus carencias de medios. Ocurrió por ejemplo este viernes en la línea de media distancia Vigo-Ponferrada. El vehículo que tenía que cubrir esa línea se había averiado y ante la falta de un sustituto mejor la empresa subió a los pasajeros a uno de los pequeños trenes turísticos que este verano recorrerán Galicia. El problema es que el suplente es cuatro veces más pequeño que el titular y el viaje acabó con los pasillos llenos de maletas y gente sentada. Ninguno de los clientes que presentó reclamaciones cobrará compensación.

«Ya nos extrañó cuando vimos ese tren en la estación de Vigo en la vía en la que se suponía que estaba el nuestro», contaba ayer la monfortina Alba Rodríguez, que estudia en Vigo y el viernes volvía de fin de semana a casa. Era evidente que el convoy en el que tenían que subir no era el moderno media distancia de la serie 470 que cubre ese tipo de recorridos en Galicia, sino uno de los trenes que desde el 2013 mueven turistas en comarcas como O Ribeiro o la Ribeira Sacra. Es inconfundible sobre todo por su aspecto exterior, ya que está completamente cubierto por vinilos con paisajes. Pero también por su tamaño. Se trata de un único vagón con la cabina de conducción incorporada y solo sesenta plazas, frente a las 260 de los trenes que hacen habitualmente los servicios de media distancia en Galicia.

Casi todas las plazas quedaron ya ocupadas solo con los viajeros que subieron en Vigo, así que al llegar a Ourense empezaron los problemas. El revisor pidió a los pasajeros que habían comprado billete hasta Monforte que saliesen con él. «Pensamos -cuenta Alba Rodríguez- que nos iban a subir a otro vagón». Pero no. Les dijeron que en vista de que estaba lleno, ellos podían esperar al Alvia Santiago-Lugo que llegaría aproximadamente tres cuartos de hora más tarde a Ourense. La mayoría se negaron y volvieron a subir. Sus asientos habían sido ya ocupados por otros clientes, así que fueron hasta Monforte de pie o sentados en los pasillos. Al menos cinco de los afectados presentaron reclamaciones en la estación monfortina.

En Renfe dicen que es seguro

Portavoces de Renfe admiten que el viernes cubrieron el trayecto Vigo-Ponferrada con el tren turístico porque. El vehículo asignado a esa línea fue el que se averió por la mañana en un paso a nivel de Monforte y no había otro igual para sustituirlo a una distancia razonable. En la empresa subrayan que el tren turístico está tan homologado y es tan seguro como cualquier otro en activo. Creen además que si eso hubiese pasado cualquier otro día, sus sesenta plazas habrían bastado. Pero era viernes, un día de especial tráfico y con más clientes con maletas que el resto de la semana. En cualquier caso, no habrá compensación para los afectados. En algunos trenes, como el Alvia, Renfe tiene prohibido vender más billetes que plazas sentadas disponibles hay. No es el caso de los de media distancia de la serie 470, ni tampoco del rotulado como tren turístico.