Monforte aplica desde hace veinte años una ordenanza de tráfico sin validez

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

El alcalde descarta que las multas ingresadas por infracciones puedan ser ilegales

06 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Se aplica desde hace más de veinte años y no tiene valor alguno. La ordenanza local de tráfico de Monforte siempre ha sido papel mojado. Fue aprobada inicialmente en julio de 1995, pero a los responsables municipales se les escapó en aquel momento un detalle fundamental. No repararon en que era necesario elevar a definitivo aquel primer acuerdo. Ni lo hicieron ellos ni los equipos de gobierno que se han sucedido desde entonces. El alcalde dio cuenta del desaguisado en el último pleno. La portavoz del BNG, Pilar López, había pedido antes que se modificase la ordenanza con el fin de reservar plazas de estacionamiento para uso de los hoteles. «Non se pode modificar o que non existe», le respondió Tomé.

Para ser exactos, el texto de la ordenanza existe. Incluso llegó a ser publicado en el Boletín Oficial de la Provincia en la etapa de Nazario Pin, cuando se procedió a su aprobación con carácter inicial. Pero no volvió a pleno tras la exposición pública, por lo que a efectos legales carece por completo de validez. «Non sabemos o que pasou daquela, o certo é que nunca chegou a entrar en vigor e ninguén se decatou ata agora», dice el alcalde.

El Ayuntamiento no tiene constancia documental de la aprobación definitiva de la ordenanza de tráfico. El actual equipo de gobierno se puso en contacto con los servicios de la Diputación encargados de la publicación del BOP para saber si había llegado a insertarse el segundo y definitivo acuerdo. La respuesta fue negativa. En vista del panorama, en el último pleno se acordó por unanimidad proceder a la redacción de una nueva normativa.

Reglamentación general

Salvo Esperta Monforte, todos los grupos de la corporación tuvieron responsabilidades de gobierno desde el año 1995. Quizá por ello, el pleno pasó de puntillas sobre la situación irregular de la ordenanza de tráfico. Pero su carencia de validez plantea importantes interrogantes. El primero, si tienen validez las multas que se están aplicando. El alcalde entiende que no se ven afectadas por la situación anómala de la ordenanza. «Nas sancións estanse a aplicar os baremos que figuran na normativa xeral de tráfico», dice Tomé.

Consultado ayer por este diario, el secretario declinó valorar esta cuestión a través de una conversación telefónica. Otras fuentes municipales confirmaron que en los expedientes sancionadores que tramita la Policía Local se toma como referencia el reglamento general de circulación de la Dirección General de Tráfico. El conductor sorprendido estacionando en carga y descarga, por ejemplo, debe abonar cien euros si paga de inmediato, que es la cantidad mínima que fija Tráfico para esas infracciones. El camino para posibles alegaciones, en todo caso, parece haber quedado despejado.