La policía tiene claro que no hay ningún pirómano de coches suelto

Carlos Cortés
carlos cortés MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Atribuyen a un fallo mecánico el de la calle Ourense y a un accidente el del Malecón

05 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En Monforte no hay ningún pirómano de coches suelto. A pesar de que en menos de veinte días se produjeron tres incendios en otros tantos coches aparcados en la calle y de que los tres fueron en una misma zona del casco urbano, la policía está convencida de que se trata de sucesos sin relación alguna entre sí. Los especialistas de la Policía Nacional que revisaron los coches quemados sostienen que solo hay indicios de intencionalidad en el primer incendio. De acuerdo con sus conclusiones, todo apunta a que los otros dos fueron fortuitos.

Parecen tenerlo especialmente claro en el último caso, el del coche parcialmente calcinado durante la noche del miércoles al jueves en la calle Ourense. Al parecer, tenía rota la correa de distribución, pero no por efecto de las llamas. La tesis del especialista que inspeccionó el escenario es que se rompió antes de que el coche aparcase, lo que provocó un recalentamiento del motor que finalmente acabó incendiándolo. En cualquier caso, el fuego empezó en la parte superior del motor, un lugar complicado para introducir desde fuera combustible o cualquier otro iniciador.

Otro factor que descartaría que fuese intencionado es que no se encontraron rastros de ningún producto capaz de desatar el incendio. Lo mismo pasa con el anterior suceso, el del paseo del Malecón. Las llamas empezaron en un cubo de basura colocado en la calle junto a una de las ruedas del coche. La duda estriba en cómo es que ardió la basura en un día frio y húmedo. Pudo ser por una simple colilla arrojada por descuido.

17 de enero

Arde a las 2:45 h. un Seat Ibiza en la calle Pascual Veiga. El fuego empezó en la parte trasera del coche. El calor de las llamas causa daños también en una furgoneta

17 de enero

Arde un Citroën Xsara en el paseo del Malecón a las 23:30 h. El fuego empezó en un cubo de basura colocado junto a una de las ruedas delanteras

3 de enero

Arde un Volkswagen Golf en la calle Ourense a las 22:00 h. El fuego empezó en el motor

El primero sí fue provocado y hay indicios que apuntan a una venganza personal

Los dos últimos parecen accidentales, pero el primero no. Al parecer, entre los restos del coche que ardió durante la madrugada del 17 de enero en la calle Pascual Veiga aparecieron restos de productos combustibles. Además, al contrario de lo que sucedió en los otros dos casos aquel incendio empezó en la parte trasera del vehículo, lo menos habitual cuando se trata de un siniestro ocasionado por una avería.

La policía tiene incluso un sospechoso. Se trata al parecer de una persona que fue denunciada por la propietaria del vehículo calcinado. Agentes encargados del caso lo han interrogado y él lo niega todo, pero tras una investigación posterior la policía mantiene la hipótesis de que aquel incendio fue efectivamente provocado por una venganza personal.

Si los expertos de la policía aciertan, la acumulación en menos de veinte días de de sucesos tan parecidos y poco frecuentes sería una simple coincidencia.