Monforte se quedará sin ayudas europeas si no ataja los vertidos

Luis Díaz
luis díaz MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

La directiva de residuos obliga a mejorar el saneamiento antes del 2022

27 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La mejora del saneamiento se sitúa en primer lugar, por encima incluso de la financiación del plan de urbanismo, en la lista de prioridades para las que Monforte espera obtener el respaldo económico de la Diputación de Lugo. El alcalde lo dejó claro ayer tras la entrevista que mantuvo con el presidente de la institución provincial, Darío Campos. «As carencias no saneamento condicionan a actividade do polígono industrial e do porto seco», señala José Tomé.

El problema de los vertidos, dice el alcalde «vén de lonxe». Pese a las elevadas sanciones que debe abonar con frecuencia el Ayuntamiento, las deficiencias la red de saneamiento y los sistemas depuración siguen sin ser resueltas. Pero la situación actual no se podrá prolongar indefinidamente. «O problema ten que estar resolto antes do 2022, porque a partir dese momento as sancións vanse endurecer», apunta Tomé, en referencia a las pautas de la Comisión Europea.

Tras conceder tres prórrogas en su entrada en vigor -los años 2001, 2006 y 2012-, las autoridades de Bruselas no están dispuestas a retrasar más allá del 2022 la aplicación de la nueva directiva marco de residuos. Las administraciones que la incumplan pasarán a una lista negra, que entre otras consecuencias las priva de la financiación de inversiones con cargo a fondos europeos. La aportación comunitaria hizo posible en Monforte, por citar actuaciones recientes, la puesta en marcha de la nueva potabilizadora, la ampliación del paseo fluvial a Piñeira o la primera fase de los accesos al puerto seco.

El respaldo económico de la Diputación -garantizado por su presidente, aunque sin concretar cifras- no es el único que precisa el Ayuntamiento para resolver el problema de los vertidos, que según el estudio realizado por Augas de Galicia costaría en torno a once millones de euros. Tomé negocia un convenio en el que, además del Ayuntamiento, intervendrían la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y la Xunta de Galicia.

Un convenio a cuatro bandas en el que queda por definir el respaldo de la Xunta

El alcalde expuso al presidente de la Diputación de Lugo las principales carencias de la red de saneamiento en Monforte. Pese a las obras de encauzamiento del río, explicó Tomé, «seguen existindo focos de vertido no Cabe». A este problema hay que añadir las filtraciones de pluviales al alcantarillado y la incapacidad de la depuradora general, y de la planta del polígono industrial, para tratar el volumen de aguas residuales en muchos momentos.

«A solución pasa pola sinatura dun convenio plurianual no que colaboren as diferentes administracións», sostiene Tomé. Incluso expone un posible reparto de costes con vistas a acabar con los vertidos en el plazo que marca Bruselas. La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil aportaría el 50%, la Xunta de Galicia el 25%, la Diputación de Lugo el 15% y el Ayuntamiento de Monforte el 10% restante.

Canon en los recibos

Según el alcalde, quedaría por concretar el visto bueno de la administración autonómica a ese reparto. «Estou seguro de que na Xunta nos van tratar igual que a outros concellos, non o poño en dúbida», dice Tomé. La financiación de la mejora del saneamiento es una de las cuestiones que figuran en su agenda para la reunión que solicitó con Núñez Feijoo. «Os veciños de Monforte están a pagar o canon de saneamento no recibo da auga e tamén teñen dereito aos investimentos», afirma el regidor.