Jarro de agua fría en A Pinguela

luis conde MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Un grave error a la hora defender un córner propició la primera derrota del Lemos

01 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Club Lemos encajó su primera derrota en su retorno a la Preferente Autonómica, y lo hizo en un partido con dos fases bien diferenciadas. En la primera parte, el equipo monfortino no compitió, y fue desarbolado completamente por un Viveiro que es serio candidato a jugar por el ascenso a Tercera División. En la segunda entrega, los locales reaccionaron, lo que les permitió empatar, y solo un grave error al no defender correctamente un córner del Viveiro les impidió haber salvado un punto.

El entrenador, Martín Murado, lamenta esta derrota, pero se muestra crítico con la primera parte de sus futbolistas. «La primera mitad que hicimos fue decepcionante. Fue de lo peor que le he visto a este equipo desde que estoy aquí», indica el preparador lucense.

Murado hace esta lectura de lo que observó en la primera mitad. «Nos costó entender la dificultad que suponía para nosotros el Viveiro en mediocampo. No fuimos capaces de dificultar su juego combinativo», comenta.

Al técnico le gustó más la segunda entrega, que fue diametralmente opuesta a la primera. «Me gustó la reacción de la segunda parte, en la que demostramos que si estamos centrados y lo damos todo en el apartado físico y defensivo, podemos competir con cualquier oponente. En este tramo del choque se vio otro Lemos, eso sí, con algunas carencias», añade Murado.

Error de concentración

A falta de tres minutos para la conclusión del partido, el empate parecía ya el resultado definitivo. Es más, incluso el Viveiro sacó del campo al incombustible Aurelio y metió a un defensa. Aún así, los visitantes marcaron. La forma de encajar el 1-2 no gustó a Murado. «Fueron un cúmulo de errores. No estuvimos atentos en esa jugada, en la que no podemos permitir que un futbolista remate totalmente solo en el área pequeña», dice.

La plantilla regresa hoy a los entrenamientos, y Murado tiene un objetivo. «Ahora lo que toca es levantar el ánimo de la gente, porque una derrota, y más así en la recta final de un partido, siempre afecta más. Lo que tenemos es que corregir los errores que cometimos en la primera parte, y ver el lado positivo de la segunda, en la que, con independencia de hacer mejor o peor fútbol, fuimos capaces de dominar a un Viveiro, que al final estará arriba», señala.