La directiva asume que habrá bajas de socios por la reposición del muro
29 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.En una tensa asamblea, en la que se sucedieron las intervenciones subidas de tono, los socios del Club Fluvial de Monforte aprobaron la derrama que pedía la directiva para la reposición del tramo de muro afectado por las riadas invernales que se pasado mes de junio. Las obras serán adjudicadas a Esmon, una de las cinco empresas que presentaron sus ofertas, por un precio de 61.410 euros.
El importe de la derrama acordado en la reunión, que tuvo lugar a última hora de la tarde del pasado miércoles, será de 36 euros, para los 1.631 socios titulares, y de 18 euros, para los 248 de entre 18 y 25 años de edad que pagan cuota de estudiante, condición que deben acreditar anualmente para renovarla.
La presidenta del Club Fluvial, Luisa Vázquez, detalló que el importe de la derrama se pagará en dos plazos, que se pasarán a cobro previsiblemente en los meses de agosto y octubre para que no coincidan con ningún recibo bimensual. La directiva da por sentado en sus cálculos que, debido a la polémica que suscitó la colecta para costear la reposición del muro, algunas de las cuotas no llegarán a cobrarse por la baja de los titulares.
«Hay gente que no está de acuerdo con tener que pagar este dinero a mayores y ya se están produciendo bajas», señaló Luisa Vázquez en la tarde de ayer, apenas veinticuatro horas después de la acalorada asamblea.
De acuerdo con los datos de la directiva, en la asamblea habías 235 socios con derecho a voto, de los que 89 defendieron que no se aplicase derrama alguna para costar la reposición del muro cuyo desplome impidió este verano poder abrir los vestuarios de la piscina.
«Agradezco la participación de los socios en la última asamblea. Ojalá que cuando haya alguna otra, de carácter ordinario, venga tanta gente. Así estaría mejor informada y no habría tantos corrillos», declaró la presidenta del Club Fluvial.
En las asambleas ordinarias rara vez se dan cita más de treinta socios. A la reunión en la que se debatió la derrama, por el contrario, acudieron más de trescientos, entre socios titulares y familiares. «El Club Fluvial es de los socios, la directiva se limita a realizar su trabajo. Si la gente acudiese más a menudo a las asambleas, sabría de primera mano lo que se hace y cómo están las cuentas», manifestó Luisa Vázquez.