Alegato contra el botellón en la Feira do Viño de Chantada

Luis Díaz
Luis Díaz MONFORTE

LEMOS

ROI FERNANDEZ

El escritor Xulio López Valcárcel, cuyas raíces familiares están en esta ribera del Miño, reivindicó ayer «a cultura do viño» frente al rito «bárbaro e degradante do botellón» en el pregón de la feria vitícola de Chantada

09 mar 2014 . Actualizado a las 23:04 h.

Xulio López Valcárcel recordó su primer contacto con el viñedo siendo un niño, de la mano de su abuelo materno, en la ribera de Sobrecedo, en el municipio de Taboada. «Viñedos definidos polo vagaroso ir do río Miño, custosos e sacrificados de traballar, pero que debuxan unha das paisaxes máis singulares e fermosas que se poden atopar», según la definió en su pregón. En Pesqueiras, cerca del embalse de Belesar, el escritor posee una viña cuya producción destina a autoconsumo.

Como todo lo bueno, señaló el pregonero, «o viño debe ser tomado na súa xusta medida, pois é amigo do sabio e inimigo do bébedo». El consumo responsable de esta bebida, destacó, es algo arraigado en la cultura popular y debería ser un modelo a seguir frente «novos ritos bárbaros e degradantes como o botellón, malos para a saúde e que converten a diversión en liorta e mala educación no medio dunha esterqueira».

El pregonero quiso rendir homenaje a los viticultores que a lo largo de generaciones mantuvieron vivo el paisaje de las riberas con su trabajo y también a los que supieron aprovechar su legado «aplicando á tradición as modernas técnicas enolóxicas». El vino, afirmó, «é tan vello como a propia Humanidade», pero también «un poderoso elemento dinamizador» en el que puede radicar el futuro de una Ribeira Sacra cada vez más conocida.